YOLANDA CERON
22 años sin YOLANDA CERON
22 años con verdades a medias
22 años de impunidad
Yolanda Cerón, la hermana del Pacífico, la misionera que encarnó el evangelio de Jesús haciéndolo una praxis, compartiendo su vida con los excluidos, ofrendando su vida por la vida de quienes sus derechos eran vulnerados.
Nacida en Berruecos Nariño el 15 de septiembre de 1958 en el seno de un hogar humilde y católico, estudió ciencias de la educación y religión y como diría su hermana Lourdes, “el señor la tenía predestinada para realizar la misión de defender la vida y la naturaleza”. Se hizo religiosa en la congregación de las hermanas de María Nuestra Señora donde ingresó en 1982.
La ética de una cristiana comprometida con el evangelio de Jesús de Nazaret, la llevó a asumir riesgos que traspasaron los límites ante el despojo territorial; por esta razón la criminalidad organizada en el pacífico colombiano, especialmente en el municipio de Tumaco determinó su muerte ante la denuncia argumentada que Yolanda Cerón hizo ante autoridades locales, regionales, nacionales y también en la esfera internacional. Una de sus mayores denuncias fue el contubernio establecido entre autoridades civiles, fuerza pública, empresarios, comerciantes con la estructura paramilitar bloque libertadores del Sur.
Su voz profética sonó como aquella voz en el desierto, poco escuchada, negada, pero al final silenciada porque su eco incomodaba a un poder establecido en una región empobrecida cuyo territorio generaba mucha riqueza a empresas palmeras y comerciales.
El trabajo acucioso sobre la ley 70 que Yolanda Cerón realizó en Tumaco, arrojaría como resultado la titulación colectiva de 96.000 hectáreas para comunidades afrodescendientes de Nariño.
El 21 de septiembre de 2001 cuando salía de la oficina de Pastoral Social en Tumaco, donde se desempeñaba como directora, dos sicarios que se movilizaban en motocicleta desenfundaron pistolas con silenciador le propinaron tres disparos que segaron la vida de Yolanda Cerón, la misionera, la defensora de Derechos Humanos, la mujer pequeña de estatura, pero de pensamiento, corazón y voz enorme. La mujer soñadora de mundos nuevos, posibles y justos.
Yolanda Cerón, la hermana del Pacífico.
Yolanda vive en las comunidades negras que defienden su territorio en la costa Nariñense, Yolanda vive en la verdad de las comunidades que buscan justicia sin sed de venganzas, ni rencores.
Yolanda vive en los colectivos juveniles culturales y ambientales que evocan su memoria y llevan su nombre.
Yolanda vive en los colectivos de mujeres afectadas por las violencias que se organizan para reivindicar los derechos de las comunidades y construir nuevas formas de relacionamientos.
Yolanda vive en nuestra memoria
Yolanda Cerón, SIN OLVIDO