Tiros a la vista – Traumas oculares en el marco del Paro Nacional en Colombia

Este informe conjunto, realizado entre el Programa de Acción por la Igualdad y la Inclusión Social (PAIIS) de la Universidad de los Andes5, Temblores6 y Amnistía Internacional7 , documenta la violenta represión de la protesta social en Colombia en el marco del paro nacional, iniciado en abril del 2021 en Colombia, que ha dejado un centenar de personas víctimas de trauma ocular.

Con este informe se busca visibilizar las consecuencias del actuar desmedido de la Policía colombiana a través del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) y el daño sufrido por centenares de personas lesionadas de gravedad, particularmente de aquellas con traumas oculares. Al cierre de esta investigación, los registros de heridas oculares sufridas por manifestantes superan los cien casos8.

La base de este informe ha sido establecida en la documentación y análisis de doce casos de violencia policial, que dejó como resultado trauma ocular irreversible. Cuatro de estos casos, ocurrieron en años anteriores (2003, 2007, 2013) y ocho son casos ocurridos en el marco del paro nacional de 2021. Si bien la mayoría de los casos analizados en este informe sucedieron en Bogotá, algunos ocurrieron en Popayán (Cauca), Florencia (Caquetá), Medellín (Antioquia) y Manizales (Caldas).

En este informe se recogen los testimonios de cinco víctimas de traumas oculares, a quienes el accionar desmedido del ESMAD les ha vulnerado el derecho a la integridad. Ligada a las afectaciones físicas y mentales, las víctimas dan cuenta de las múltiples barreras que enfrentan para el goce efectivo de sus derechos a la salud, a la movilidad, a la educación y al trabbajo, entre otros.
Uno de los casos emblemáticos documentados en este reporte es el de Leidy Cadena, ocurrido el 28 de abril de 2021 en el marco de la primera joranada del Paro Nacional. Su testimonio representa las vivencias de cientos de personas que han sufrido trauma ocular por el accionar desmedido del ESMAD. Para Leidy, este trauma ocular fue dirigido hacia ella y corresponde a un hecho de violencia basada en género. Las barreras que ha enfrentado en acceso a atención primaria en salud y atención psicosocial son mayores, así como los obstáculos para avanzar en la investigación de los hechos y la identificación de los responsables por parte de las autoridades. Uno de los temas más preocupantes es que con las denuncias y por la visibilidad de su caso, se vio obligada a dejar Colombia por las constantes amenazas contra su vida y la de su familia.

A pesar de las diferencias en tiempo y lugar, esta investigación pone nuevamente en evidencia patrones en las conductas de agentes del ESMAD, que sustentan las denuncias reiteradas sobre la sistematicidad en sus prácticas de uso excesivo y desproporcionado de la fuerza, con el ánimo de castigar a quienes protestan. Con este informe se busca contribuir a la
búsqueda de justicia de quienes han sufrido trauma ocular por ejercer su legítimo derecho a la protesta social en Colombia y se realizan recomendaciones puntuales al Estado para garantizar atención integral a las víctimas y evitar la repetición de estas violaciones a los derechos humanos.

Además, en esta investigación se pone en evidencia la necesidad de fortalecer la atención en salud tanto en la emergencia como en el acceso a salud mental y rehabilitación integral. Los testimonios de las víctimas dan cuenta de la falta de una ruta de atención integral para casos de trauma ocular generados como consecuencia de actos de violencia policial.

En base a las evidencias y testimonios presentados en este informe, se recomienda a las autoridades nacionales cumplir sin demora las recomendaciones formuladas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos tras su visita de trabajo en junio de 2021. En particular, aquella dirigida a asegurar que el uso de medios no letales de control del orden público, estén sometidos a un protocolo estricto y público, para prevenir afectaciones a la integridad y a la salud de manifestantes9. Asimismo, se insta a las
autoridades a cumplir con la sentencia de la Corte Suprema de Justicia de septiembre de 2020, con el fin de garantizar los derechos a la expresión, reunión, protesta pacífica y libertad de prensa. PAIIS, Temblores y Amnistía Internacional se unen al llamado de organizaciones sociales nacionales y organizaciones internacionales para reformar de manera estructura a la
Policía Nacional y en particular el Escuadrón Móvil Antidisturbios, garantizando un enfoque civil en su accionar, así como sistemas de supervisión e investigación independientes y efectivos.

Informe completo:

Fuente: Amnesty International 2021

Imagen: JULIÁN PATARROYO GARZÓN y MÓNICA VÁSQUEZ VARGAS (