Representante de víctimas en caso de Palacio de Justicia solicita investigar violaciones al DIH
Se compulse copias a la Fiscalía General de la Nación para que se investigue la participación de todos los funcionarios que se encuentran en la cadena de mando implicados en la desaparición forzada de los 8 trabajadores de la cafetería del Palacio de Justicia, 3 visitantes ocasionales y la militante del M19, Irma Franco.
La solicitud fue hecha por el abogado Rafael Barrios Mendivil en sus alegatos finales, miembro del Colectivo de de Abogados “José Alvear Restrepo” y representante de las víctimas del holocausto, para que se establezca su grado de colaboración en la comisión de éste delito.
De igual manera solicitó, se investigue a Bernardo Alfonso Garzón Garzón y a Jorge Arturo Sarria Cobo, alias “Rambo Criollo”. El primero, un suboficial perteneciente a una red de inteligencia del Ejército Nacional que para la época de los hechos estaba infiltrado en el M19 y quien en uno de sus testimonios [1] reconoció haber visto a Irma Franco en las instalaciones del Comando de Operaciones de Inteligencia y Contrainteligencia – COICI- ubicado en el Batallón Charry Solano, lugar donde la militante fue torturada.
El segundo, un civil ex miembro de la Armada Nacional a quien la fuerza pública le entregó un arma y un chaleco antibalas, enfrentó al M-19 dentro del Palacio de Justicia y de quien se tiene pruebas testimoniales de ser una de las personas que identificaban y clasificaban a las personas que salían del Palacio de Justicia y que eran torturadas
El abogado de la parte civil, también solicitó se compulsen copias de las declaraciones de Gustavo Arévalo, a la Fiscalía General de la Nación, para que se investiguen las violaciones al DIH cometidas durante la retoma al Palacio de Justicia, que tienen que ver con la desaparición forzada del militante del M19, Luis Otero Cifuentes.
Arévalo Moreno, era un Sargento analista del blanco M19 que trabajaba con el COICI, y quien según su propio testimonio infiltró a la Cruz Roja, con el fin de identificar a las personas que salían con vida del Palacio de Justicia, clasificarlas como sospechosas o especiales, subirlas al segundo piso de la Casa del Florero donde eran torturadas por los miembros del COICI y el B-2, para luego trasladarlas a diferentes lugares donde eran interrogadas, nuevamente torturadas, y finalmente desaparecidas.
Este sargento, conjuntamente con el Mayor Fernando Blanco Gómez torturaron y desaparecieron a los empleados de cafetería, los visitantes ocasionales y a la guerrillera Irma Franco Pineda.
Barrios Mendivil, también solicitó la máxima pena de condena para el Mayor General (r) Iván Ramírez Quintero, Coronel (r) Fernando Blanco Gómez y el Sargento Mayor (r) Gustavo Arévalo Moreno, en calidad de coautores mediatos y fungibles del delito de desaparición forzada en la modalidad de agravada por ejercer autoridad y jurisdicción, del que fueron víctimas los 11 desaparecidos del Holocausto del Palacio de Justicia y que se cumpla dicha condena, en un centro de reclusión ordinaria, por tratarse de crímenes de lesa humanidad.
Notas
[1] “se que allí [en el COICI] se tuvo a una niña de nombre IRMA FRANCO, a esta la mantuvieron en una camioneta color café, que en ese entonces estaba acondicionada para interrogatorios, una camioneta Ford Chevi Ban (sic), y se que esta niña suministró información sobre una serie de atentados que iban a ocurrir contra esa Unidad”