Por bombardeos en el Catatumbo, líderes de la izquierda se reunirán con Santos
Los fuertes enfrentamientos entre la fuerza pública y las guerrillas han obligado a los campesinos de Mesitas, Bracitos y Santa Catalina en el municipio de Hacarí en el Norte de Santander, a organizar el refugio humanitario de Hacarí, en donde el número de campesinos que huyen de los enfrentamientos se incrementa alarmantemente.
Por esta razón diferentes organizaciones de la izquierda colombiana como, la Unión Patriótica, el Polo y La Marcha Patriótica, se reunirán con el presidente Juan Manuel Santos, para discutir sobre las operaciones militares que están afectando directamente a los campesinos de esta región del país.
La izquierda colombiana insistirá en un cese al fuego bilateral para garantizar la integridad de los campesinos que nada tienen que ver en el conflicto. Los campesinos de la región del Catatumbo han liderado el proceso en su región para establecer la Zona de Reserva Campesina. La comunidad perteneciente a estas veredas dice sentirse presa y sin libertad a raíz de los constantes operativos militares en la zona.
Por su parte La Asociación Campesina del Catatumbo – ASCAMCAT ha expresado su preocupación por el deterioro del orden público en la zona, alimentado por las constantes denuncias que en las últimas semanas se han dado a conocer por violación al principio de distinción; de la misma manera se exige al ejército nacional que respete el derecho fundamental a la libre locomoción, al derecho a la salud y aísle a los campesinos en función de sus objetivos militares.
ASCAMCAT también le hace un llamado a los actores armados que decreten inmediatamente un cese al fuego bilateral permanente en la zona del Catatumbo que sirva para replicarse como gesto de paz en las demás regiones del país.
Las comunidades campesinas de Mesitas se declararon en refugio humanitario a raíz de los enfrentamientos y los ametrallamientos del ejército desde helicópteros artillados en contra de las guerrillas, una de las consignas de los campesinos consiste en hacer resistencia pacífica a los actos de guerra y no retirarse del territorio.
En el refugio humanitario de Hacarí ya son 180 adultos y 90 menores desplazados los que se encuentran resguardándose del conflicto, sin embargo cada día sigue creciendo el número de habitantes de la zona que acuden al refugio.
La agencia de prensa campesina, Prensa Rural hizo un recuento de los incidentes violentos que han afectado a los pobladores:
5 de marzo: a pocos metros de la vereda La Laguna en Hacarí, un bombardeo ocasionó daños en casas de los campesinos, así como daños ambientales en bosques y en dos fuentes hídricas que funcionan como reserva de agua de la población.
3 de abril: en la vereda Burgama del municipio San Calixto, 5 familias tuvieron que dejar sus hogares debido a las constantes acciones bélicas que genera la base militar ubicada en el sitio El Alto, que el Estado construyó a 100 metros de estos
12 de abril: en el corregimiento Santa Catalina del municipio de San Calixto, un bombardeo causó daños ambientales y dejó serias secuelas psicológicas en ancianos y niños, quienes ya no pueden conciliar el sueño con facilidad.
14 de junio: en la vereda Mesitas de Hacarí, militares dispararon contra unos campesinos que se encontraban en el río, quienes lograron esquivar las balas.
15 de junio: al anochecer las balas disparadas desde un helicóptero también sobre los campesinos de Mesitas, destruyeron los techos de las casas.
16 de junio: falleció una menor de 8 años alcanzada por una bala de fusil en Mesitas
19 de junio: fue asesinado un campesino reconocido miembro de la Junta de Acción Comunal del corregimiento de Santa Catalina en San Calixto.
El lanzamiento de explosivos como morteros y granadas, sumado a los disparos desde helicópteros militares han dejado decenas de animales muertos.