Plan ofensivo contra CAVIDA para su desestructuración
A las dos de la tarde del pasado 29 de marzo al terminar una reunión en Travesía, Territorio Colectivo de Cacarica, líderes de CAVIDA fueron abordados por un poblador que informó que algunos de sus integrantes habían sido declarados blancos de una operación ofensiva.
De acuerdo con el poblador, la estructura armada ilegal opera desde ya con saboteo a sus actuaciones de formación y de incidencia, así como, un plan de asesinatos por parte de las estructuras neoparamilitares.
La información fue filtrada por unidades de esta estructura ilegal a un poblador.
Ayer domingo 2 de abril, una fuente cercana a las autodenominadas “Autodefensas Gaitanistas de Colombia” confirmó que existe plan de acciones en desarrollo.
Expresó la fuente que siete líderes o más de las Zonas Humanitarias serían asesinados por ser “informantes de los de Justicia y Paz“.
Agregó que había un plan para matarlos en Riosucio y Turbo sin usar armas de fuego y de manera esporádica.
Dado que los líderes de CAVIDA se han negado a aceptar las propuestas regionales de los “paramilitares” con las denuncias y los viajes que hacen a Bogotá y al exterior con los de la ONG, retrasaron los planes y había que controlarlos.
Reiteró que sobre lo que se denuncie de los AGC se enteran rápidamente porque tienen muchos informantes pagos entre militares, policías y políticos.
La fuente sostuvo que compartía la información porque sabía que los afrocolombianos de CAVIDA eran buenas personas.
Dentro del plan de acciones en desarrollo contra CAVIDA están el saboteo a sus convocatorias de talleres, la consolidación de su autoridad promoviendo proyectos, el uso de niños y jóvenes como informantes, y el reclutamiento.
Desde el 25 de febrero en medio de la militarización continúa el desarrollo de la estrategia de control social vinculada con negocios ilegales y legales de Bijao.
En este lugar han vinculado a sus filas a cuatro niños y jóvenes como campaneros e informantes. Esta red de involucramiento se ha ido ampliando a otros comunidades como Travesía en donde cuentan con tres informantes y en Quebrada Bonita, San José La Balsa y tienen entre otras funciones hacer seguimiento a las actividades de CAVIDA.
Los neoparamilitares han limitado a pobladores de Cacarica a aceptar las propuestas de CAVIDA con el fin de neutralizarles indicando que solo pueden escuchar, nada pueden informar, nada pueden firmar se respaldo.
Agregó que de las AGC se está proyectando en el Bajo Atrato en el escenario electoral a través de la circunscripción electoral especial de Paz.
Hoy martes en horas de la mañana pobladores confirmaron la presencia de alrededor de 300 hombres de las AGC entre Sautatá – La Loma y Palo Blanco, sobre el río Atrato.
La comunidad de Cacarica, asociada en CAVIDA, continúan en altísimo riesgo ante una estrategia eficaz de copamiento territorial de un grupo heredero del paramilitarismo con una apuesta socio política y económica que el gobierno ha sido incapaz de enfrentar.
La reciente reunión de trabajo en la sede de CIDH a pesar de lo allí abordado tampoco ha logrado generar un movimiento de respuesta integral ante la consolidación neoparamilitar.
Bogotá, D.C., abril 4 de 2017
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz