Palacio de justicia del juicio y la censura
A eso de las 8:00 a.m. el viernes 25 de julio la calle 31 con Carrera 6ª se convirtió en calle de honor para adobar el rostro de hierro que finge cumplir con la ley y la moral. En medio de pancartas en las que aparece la fotografía del Coronel PLAZAS VEGA recibiendo la comunión del Papa Juan Pablo II y con la expresión “Dios está contigo” o del Palacio de Justicia y el rostro superpuesto del militar con un casco en el que se lee “Un soldado honorable” ingresó al Juzgado 3º Penal Especializado de Bogotá el Coronel ® ALFONSO PLAZAS VEGA.
El ex alto oficial, quien se encuentra con detención preventiva, llegó procedente de las instalaciones de la Escuela de Infantería, que se sabe es un centro de privilegios. Se bajó de la camioneta en que se transportó acompañada de escoltas, sin esposas en sus manos, a diferencia de cómo ocurre con otras personas, por que la justicia es injusticia y antidemocracia, exclusión y marginalidad para unos, en la mayoría de los casos, que cuentan con medidas de aseguramiento. Luego con altivez, con un dejo de vano orgullo saludó con total tranquilidad a los medios de información y dio entrevistas como si se tratara de un pro hombre.
Tal inspiración llevó a sus áulicos y enceguecidos como parte del segundo acto de la idolatría y de la afrenta a las víctimas, a lanzarse sobre los familiares de las víctimas que se encontraban silenciosos, en un acto de censura exigiendo verdad y justicia con fotografías de algunos de los 11 desaparecidos de la cafetería del Palacio de Justicia. El fanatismo, la euforia que genera la impunidad social y la impunidad jurídica de estos 22 años, que parece desmoronarse por fin, no daba tiempo a la razón ni a otra sensibilidad. Una joven mujer con frases como “usted señora sabe, que su hijo está en una fosa común”, aplastó de tajo la expresión humilde de doña CARMEN SUSPES, madre de DAVID SUSPES, cuando ella exigía verdad.
Al lado de esa joven, militares retirados, entre ellos muchos de no grata recordación en la poca memoria colectiva del país, como el General ALVARO VELANDIA, celebre por la desaparición forzada entre otras personas de NYDIA ERIKA BAUTISTA, el General ® PAUSELINO LA TORRE, comprometido por violaciones de derechos humanos y la apropiación de tierras en el Curvaradó y el General ® JAIME ALBERTO USCATEGUI, investigado por la masacre de MAPIRIPAN, allí respaldando la impunidad del poder militar
A eso de las 9:00 a.m. el escenario se multiplicó. A un lado de la calle, a la entrada del juzgado los simpatizantes y afectos de la impunidad jurídica y social con sus pancartas de veneración y adoración, de justificación del crimen de Estado amparada en la imagen del guerrero justo y del hombre creyente, y enfrente de ellos, el Sin Olvido como expresión de apoyo a las víctimas silenciadas, atropelladas por la prepotencia del poder.
El otro escenario, la Audiencia Preparatoria, a ella ingresaron algunos familiares de las víctimas de desaparición forzadas, los abogados del Colectivo de Abogados y de la Comisión de Justicia y Paz, parte civil dentro de la causa penal que se sigue ante el Juzgado 3º Penal Especializado de Bogotá por los delitos de Secuestro Agravado y Desaparición Forzada de CARLOS AUGUSTO RODRIGUEZ VERA, LUZ MARY PORTELA DE LEON, CRISTINA DEL PILAR GUARIN, BERNARDO BELTRAN HERNANDEZ, DAVID SUSPEZ CELIS, GLORIA STELLA LIZARAZO FIGUEROA, NORMA CONSTANZA ESGUERRA, GLORIA ANZOLA DE LANAO, HECTOR JAIME BELTRAN FUENTES, LUCY AMPARO OVIEDO E IRMA FRANCO PINEDA en los hechos de la retoma del Palacio de Justicia los días 6 y 7 de noviembre de 1.985 por parte del Ejército Nacional. Del otro lado, ALFONSO PLAZAS VEGA, sus familiares y amigos.
La defensa de PLAZAS planteó nulidad del proceso por la vulneración del derecho a la defensa; la ausencia de la conducta de Desaparición Forzada al momento de los hechos y la incompetencia de la justicia ordinaria para su juzgamiento. Argumentos que fueron desestimados por parte del Señor Juez quien estimó que las mismas carecían de sustento jurídico debido a la contradicción evidente en relación con lo que ha sostenido la Corte Suprema de Justicia y la Corte Constitucional sobre los límites de la Jurisdicción Penal Militar en casos de Violación a los Derechos Humanos.
A la Audiencia, la Comisión Internacional de Juristas, CIJ, radicó un escrito donde esgrimió argumentos jurídicos de carácter internacional sobre los procesos de condena a crímenes de lesa humanidad, en particular, el referido al crimen de Desaparición Forzada de Personas, por su carácter de Ius Cogens o Derecho Común de los Pueblos.
Al final del día, hacia las 3:30 p.m. el Coronel retirado no se mostraba con el mismo semblante con que ingreso al despacho judicial, las objeciones en derecho a su petición de nulidad le cambió el rostro.
Y afuera, en la espera un puñado de familiares de las víctimas y sus amigos, por horas censuraron con cantos y con sus voces, la soberbia y la vanidad del poder. Una constancia para la historia. A la salida, ante la evidencia de la verdad y de la objeción de la víctimas a la verdad oficial las pancartas de apoyo al militar habían desaparecido, ya no existían los mismos seguidores de la causa injusta del militar.