Nuevos asesinatos en el Ariari, persecución, exterminio
“Se bien sus muchos crímenes e innumerables pecados: estrujan al inocente, aceptan sobornos, atropellan a los pobres en el tribunal… En todas las calles hay duelo, en todas las callejas gritan: ¡Ay, ay! Los campesinos llaman para el duelo y el luto…”
Amos 5, 12-16
RESUMEN
Un retorno en medio de la ofensiva de control militar paraestatal parece convertirse en la esperanza de millares de desplazados, y una propuesta de defensa de la vida y del territorio ante la persistente persecución, aniquilamiento, exterminio que continúa sucediendo en el Ariari.
Las 13 familias del caserío de La Macarena que se vieron obligadas a desplazarse debido a las operaciones militares combinadas de militares y paramilitares y las confrontaciones con las FARC, el 10 de mayo, regresaron a su poblado, sin ningún tipo de garantía a su poblado.
A pesar de la presencia permanente de centenares de unidades de “civiles” armados vestidos de camuflado en el entorno del caserío, de los saqueos, de la destrucción de bienes de supervivencia que produjeron las estructuras de tipo paramilitar, los pobladores regresaron a su caserío. Los pobladores han asumido el riesgo del retorno el 15 de mayo, exigieron a las estructuras paramilitares allí presentes abandonar el entorno del caserío para no ser convertidos en blanco militar.
El intento de reiniciar su vida cotidiana se ha visto afectado por los hostigamientos permanentes de la estructuras de tipo paramilitar
Entre tanto, en el municipio de El Castillo, a escasas dos cuadras del puesto de policía, el 30 de mayo, fue asesinado JOSE ALIRIO BERNAL por paramilitares que se movilizaron desde Medellín del Ariari. Los reconocidos paramilitares que perpetraron el asesinato, se pasean entre estas localidades a la vista de unidades policiales, militares.
Cinco días después, EUGENIA ROMERO MENDIETA, fue detenida por “civiles” armados de la estrategia paramilitar que la sacaron de un automotor de servicio público, junto con un hombre, de quien se desconoce su nombre. El cuerpo sin vida de EUGENIA y del varón fueron hallados en Lejanías, el 7 de junio.
La movilidad, el control de estructuras armadas encubiertas de tipo paramilitar continúa desarrollándose a la vista de todo tipo de autoridades, las que no actúan. No ven, no oyen, no escuchan. Continúa el exterminio, la persecución, que hoy suman millares de desplazados que se albergan invisibilizados en Villavicencio, Bogotá, Medellín del Ariari.
Siguen creciendo el número de asesinados y de desaparecidos mientras las autoridades militares y policiales, además de no actuar, parecen convivir con las estructuras criminales. Territorialmente existe distribución de lugares de control entre fuerzas regulares e irregulares, persisten las acciones militares combinadas de control y de represión sobre blancos militares ilegítimos.
DETALLES
• Sábado 15 de mayo, las 13 familias que se vieron obligadas a desplazarse cinco días antes, debido a los enfrentamientos armados entre la guerrilla de las FARC EP con paramilitares y militares de la Brigada 7 en la vereda la Macarena, decidieron regresar a su poblado.
Los campesinos encontraron varias casas y la escuela saqueadas, otras viviendas destrozadas.
A pesar de la presencia de tipo paramilitar a menos de 500 metros del caserío, de los hostigamientos, las amenazas, los señalamientos por parte de estos, los pobladores decidieron regresar, pues el “retorno es la única posibilidad de nuestra vida”.
Los coordinadores y la profesora de la comunidad de La Esmeralda ha exigido a los paramilitares retirarse del lugar, exigen el acatamiento del Derecho Humanitario, pero estos se han negado a respetar el retorno de los pobladores.
• Domingo 30 de Mayo, hacia las 19:00 horas, fue asesinado el Presidente del Consejo Municipal de El Castillo, JOSE ALIRIO BERNAL, por un “civil” armado de la estrategia paramilitar que ingresó a su residencia y le disparó en 7 ocasiones delante de su esposa y sus dos hijas.
Luego de disparar a JOSE ALIRIO, el paramilitar caminó por la vía pública a la vista de decenas de pobladores que se encontraban en establecimientos comerciales, se subió en la motocicleta DT 125 en donde su cómplice lo esperaba. Los paramilitares tomaron en dirección al corregimiento de Medellín del Ariari de donde habían salido en horas de la tarde.
El asesinato de JOSE ALIRIO se produjo a una cuadra de la plaza principal del casco urbano –donde permanecen los paramilitares- y a menos de tres cuadras de la estación de policía en donde es frecuente observar la circulación de los mismos.
Los paramilitares uno de ellos apodado “Guz” y el otro “El Torcido”, circularon por el municipio antes del asesinato, dando varias vueltas enfrente de otras unidades paramilitares, de militares y de policías que ejercen acciones permanentes de control en el municipio.
• Lunes 31 de mayo en horas de la mañana, unidades de la policía realizaron un allanamiento en una casa del casco urbano del municipio de El Castillo, buscando a los responsables del asesinato de JOSE DARIO. Las unidades oficiales mostraron a los pobladores el decomiso de un revolver, una pistola y propaganda alusiva a las “AUC”, y capturaron a un paramilitar.
En horas de la tarde el paramilitar que fue detenido, se le observó caminando por las calles del casco urbano de El Castillo.
Con la actuación policial se creyó que los “civiles” armados de la estrategia paramilitar habían abandonado el poblado.
Días después, desde el 2 de junio, en el corregimiento de Medellín del Ariari y en el municipio de El Castillo, los “civiles” armados de la estrategia paramilitar, incluso, los reconocido como “Guz” y “El Torcido”, circularon tranquilamente por las calles de estas localidades. Desde ese día hasta hoy continúan los paramilitares a la vista de autoridades civiles, policiales, militares sin que ninguno actúe.
• Sábado 5 de junio, “civiles” armados y uniformados de la estrategia paramilitar asesinaron a EUGENIA ROMERO MENDIETA, de 25 años de edad, en la vía que comunica al municipio de Lejanías con la vereda La Esmeralda, municipio El Castillo.
Los “civiles” armados detuvieron el vehículo de servicio público en el que se transportaba EUGENIA y obligaron a bajar a todos los pasajeros. A EUGENIA la apartaron del grupo junto con un hombre. Minutos después ordenaron a los demás pasajeros subir al vehículo público y continuar su camino hacia La Esmeralda.
Dos días después, el lunes 7 de junio, el cadáver de EUGENIA, apareció en la morgue de Lejanías reportada como NN, con visibles señales de tortura, dos impactos de bala, uno en el rostro y otro en el cuello.
En el mismo lugar fue hallado el cuerpo sin vida del campesino, del que no ha sido posible conocer su nombre, que fue detenido junto a EUGENIA.
EUGENIA había regresado a la vereda La Esmeralda a limpiar y cuidar la finca de sus padres, había sido desplazada junto a su familia en el 2002, por los operativos conjuntos del Batallón 21 Vargas de la VII Brigada y “civiles” armados de la estrategia paramilitar.
LINEAS DE INTERPRETACION
No cesa la persecución, el exterminio de estructuras armadas encubiertas de tipo paramilitar debido a la acción, omisión y comisión por omisión de la Brigada VII y de unidades policiales en los cascos urbanos.
Centenares de víctimas de asesinatos y desapariciones forzosas, de tratos crueles e inhumanos, de torturas, millares de desplazados son el resultado de una operación militar sin precedentes, iniciada semanas antes del rompimiento de las conversaciones de la guerrilla de las FARC con el gobierno del Presidente ANDRES PASTRANA.
Meses después en desarrollo de la política de “seguridad democrática” ha existido un fortalecimiento de la parainstitucionalidad en medio de incremento de presencia militar de la Brigada VII y de unidades policiales en el casco urbano
En este momento, la presencia del ejército en el casco urbano de El Castillo se realiza de manera esporádica, con una presencia permanente de la policía. Los militares ejercen un control permanente en las veredas de la rivera del río La Cal y Yamanés. Los “civiles” armados de la estrategia paramilitar y vestidos de camuflado mantienen el control de las veredas La Macarena, Caño Claro y El Jardín, con presencia permanente en las localidades de El Castillo y Medellín del Ariari. Luego de la ofensiva de las FARC- EP contra campamentos paramilitares han llegado más hombres de la estrategia paramiliar provenientes de la región de Urabá y Arauca.
La presencia de la guerrilla de las FARC EP persiste en la zonas altas, con acciones en zonas medias y bajas
Mientras la ceguera, la sordera, y la mudez institucional continúa, las víctimas siguen incrementándose. No hay investigaciones ni eficaces, ni oportunas. No hay control. Existe un absoluto desbordamiento. No hay verdad. No existe la justicia … se percibe el Estado de Derecho erosionado
Un puñado de pobladores de La Macarena, de desplazados en Villavicencio como Comunidad Civil de Vida y de Paz, son la constancia histórica y la censura moral ante un desmoronamiento del Derecho, de la dignidad, de la humanidad.
Ellos son un signo de esperanza en medio de lo que a la luces de la razón humano se ha convertido en un genocidio.
Bogotá, D.C 10 de junio de 2004
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz