Nuevo desplazamiento forzado del líder de restitución Sigifredo Bravo Pertuz, luego de amenazas por paramilitares.

Hace 8 días, el 16 de noviembre, Sigifredo Bravo Pertuz, líder de restitución de tierras, y beneficiario de medidas cautelares, por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, fue nuevamente amenazado de muerte por estructuras paramilitares en Valencia, Córdoba, obligándolo, por cuarta, ocasión a desplazarse forzadamente, junto con su grupo familiar.


Para salvaguardar su vida y recuperar su proyecto de vida, Sigifredo adquirió un predio de 15 hectáreas, en el caserío Rusia- La Mina en Valencia, Córdoba, luego de su tercer desplazamiento. SIgifredo había sido socio de la Cooperativa de Trabajadores del Agro del Blanquicet, municipio del que fue desplazado, junto con otros miembros de la Cooperativa, luego se se traslado a la via Panamericana, Km 27, del que fue otra vez desplazado por grupos paramilitares que lo presionaron para vender, a bajo costo, el predio que había adquirido gracias a la titulación realizado por el Incora.

Durante este año Sigifredo fue amenazado por paramilitares que le ordenaron abandonar la propiedad, a lo que el reclamante de tierras se ha negado.

Las amenazas de muerte más recientes se produjeron un día antes del asesinato del líder reclamante, Gildardo Padilla, amigo de Sigifredo y con quien, junto con 25 campesinos de Chigorodó, habían asistido, días antes, a una diligencia ante la Unidad de Contexto de la Fiscalía General de la Nación, en Apartado

Gildardo, también líder reclamante de tierras fue asesinado por dos sicarios paramilitares en el caserío La Rusia.

Tanto Sigifredo como Gildardo, junto con sus familias han sido blancos de una persecución por paramilitares desde 1996, ambos han denunciado el despojo de tierras de las que han sido víctimas y han exigido a las autoridades medidas eficaces de protección, que incluye el desmantelamiento de las estructuras paramilitares y su connivencia con autoridades policiales del municipio.

La familia Padilla es propietarios de la finca Las Gardenias en San Pedro de Urabá, por proteger sus derechos los paramilitares les han asesinado tres miembros de la familia y obligado a desplazar al resto de sus integrantes.

La Unidad Nacional de protección determinó que Sigifredo Bravo tiene un riesgo ordinario por, por lo que “no puede ser beneficiario del Programa de Protección, liderado por al Unidad Nacional de Protección”, conforma a la valoración realizada el mes de Octubre, por el Comité de Evaluación de Riesgo y Recomendación de Medidas – CERREM

Desde 2000 Sigifredo Bravo Pertuz ha liderado varios procesos de restitución de tierras.

Fue socio de la Cooperativa de Trabajadores de Agro de Blanquicet, municipio del que fue desplazado, junto con los demás miembros de la Cooperativa, por la violencia paramilitar.

Mientras las familias se encontraban en situación de desplazamiento en la cuidad de Chigorodó, las tierras fueron ilegalmente usurpadas.

Pese a que el despojo de tierras fue comprobado judicialmente y la fiscalía de Chigorodó ordenó su entrega material, varias familias de la Cooperativa no pudieron regresar a Blanquicet, por amenazas e intimidaciones de los grupos paramilitares que continúan controlando la región.

Otro de los líderes de Cootragroblan, Oscar Mausa fue asesinado el 24 de noviembre de 2010, en San Juan de Nepomuceno, luego de regresar de una diligencia judicial en Cartagena. En ésta reconoció a “alias 55”, uno de los mandos paramilitares responsable del desplazamiento.

Sigifredo y su familia se encuentra en algo riesgo sin respuesta eficaz del gobierno.

Sigifredo es beneficiario de medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

Leer comunicado conjunto CCJ y CIJyP

Bogotá, D.C. 28 de noviembre de 2013
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz