No más contaminación y fumigación de los ecosistemas y de nuestra vida.
El lunes 7 de septiembre, mientras en Bogotá era admitida en la Corte Constitucional la acción de tutela contra el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, en nuestro río Naya se realizó un operativo de cuatro helicópteros artillados escoltando una avioneta en la aspersión aérea de químicos sobre 19 comunidades de nuestro territorio colectivo. La operación desproporcionada, indiscriminada e inconsulta, sin valorar los efectos, sin mitigarlos ha afectado profundamente nuestra identidad, ha afectado nuestra vida personal y familia, ha afectado el ambiente y los ecosistemas.
SOMOS LA VIDA, QUEREMOS LA VIDA Y LUCHAMOS POR LA VIDA
No más contaminación y fumigación de los ecosistemas y de nuestra vida.
Desde la 1:00 p.m y durante cerca de 3 horas se realizó la aspersión aérea de un químico sobre afronayeros y afronayeras, sobre profesores y estudiantes, sobre los pobladores de los caseríos Tambor, Santa Ana, San Martín, puerto Merizalde, La Secal, Puerto Valencia, San Pedro, La Vuelta, Betania, El Trueno, Primavera, El Cacao, Agua Mansa, Pastico, Las Cruces, Chaverru, Meregildo, Sagrada Familia y El Carmen, en el bajo Naya, donde habitamos cerca de 7 mil de los 18.570 afronayeros, siendo 3.500 niños y niñas.
Fuimos sorprendidas en medio de nuestras labores cotidianas, mientras almorzábamos, mientras regresaban los estudiantes a sus casas y algunos otros trabajando en nuestros cultivos de pan coger. Nos vino veneno del cielo, cayó químico sobre nuestra piel. Nos llenamos de miedo al ver los helicópteros artillados, pensamos que nuevamente nos iban a ametrallar como el año pasado. Muchos corrieron de un lado para otro en busca de refugio, mientras que estudiantes se acostaron a la orilla del río para que los helicópteros vieran que había población civil. Sin embargo, la respuesta siguió siendo màs químicos desde el cielo, lo mismo pasó con los profesores, nadie se salvó.
En un recorrido inicial por las comunidades afronayeras entre Merizalde, Tambor y San Pedro, en las bocanas del río Naya, realizado por nuestra junta directiva del Consejo Comunitario, con el acompañamiento de la Comisión de Justicia y Paz.
Logramos constatar que 19 comunidades fueron afectadas por una aspersión aérea de químicos, provocando afectación y daños sobre la población en su piel, y la reactivación de miedos, cultivos de pan coger, granjas agroforestales y agroecológicas, el río, quebradas y otras fuentes de agua.
La aspersión aérea del químico abarcó una gran área debido a que los fuertes vientos llevaron el rocío del químico a lugares lejanos del área de la aspersión directa. La aspersión generó un riesgo a la permanencia en el territorio debido a la afectación causada sobre cultivos de papa china de la cual se saca al comercio semanalmente 2 toneladas, 150 hectáreas de arroz, 20.000 palmas de chontaduro, 15.000 palmas de coco, 300.000 árboles de Borojó, más de 200 hectáreas de caña; de la misma manera se están viendo afectadas las granjas de las instituciones educativas agropecuarias Raúl Orejuela Bueno, Patricio Olave, Primavera, El Cacao, donde se implementan iniciativas productivas en torno a pollos de engorde, gallinas ponedoras, cerdos, peces, reforestación, frutales, cría de guagua, conejos, curíes, así como las 60 parcelas agroforestales que se vienen implementando desde febrero del 2009 con apoyo de la Corporación Autónoma del valle del Cauca CVC.
De la misma manera se está colocando en riesgo directo la iniciativa de 40 parcelas agroforestales que el consejo comunitario viene implementando alrededor de la siembra de arroz, cacao, bija, frutales, forestales, papa china, caña, etc, como alternativa a la siembra de la coca impulsada por foráneos que entran y salen del río a pesar de la presencia en las bocanas de la Armada Nacional.
Lo más afectado fue el agua, el río y quebradas, que son usadas permanentemente por nosotros para beber, cocinar, bañarnos. Ya se están dando brotes de rasquiña y comezón en el cuerpo.
En nuestra interpretación sobre lo que vimos las más afectadas son:
Sector de Tambor: ubicado sobre una de las bocanas del río naya, a orillas del mar, es un territorio con 200 hectáreas sembradas sólo en caña, sin contar el coco y la papachina que produce, está habitado por 150 familias, quienes se encuentran muy preocupados, pues en este sector la aspersión aérea de químicos comenzó desde la última semana del mes julio, cuando realizaron aspersión aérea en el río Micay.
Durante la visita logramos verificar por lo menos 20 hectáreas sembradas en caña, afectadas totalmente, al punto de estar casi secas, todo su cogollo y sus hojas, de la misma manera se afectó el plátano (300 matas) y el coco (unas 50 palmas).
San Pedro: visitamos la institución educativa Raúl Orejuela Bueno, sede principal, donde desde hace 4 años se fortalece una granja integral en la que reciben capacitación agro-productiva 1.200 estudiantes y padres de familia. Toda la comunidad educativa, está muy preocupada con la decisión que ha tomado el gobierno nacional contra el territorio y especialmente contra las siembras de pan coger.
Tres estudiante de la institución y la rectora compartieron el testimonio de lo sucedido el lunes 7 de septiembre con la avioneta y los helicópteros que sobre volaron la granja, arrojando el químico que hasta el momento le ha costado la vida a 8 de los pollo de engorde y tiene en riesgo las gallinas ponedoras, los cerdos, conejos, peces y todas las siembras entre frutales y árboles maderables presentes en la granja. Además hay preocupación por los brotes de rasquiña que están apareciendo al utilizar el agua del río y de las quebradas.
Estamos muy preocupados y le hemos solicitado al gobierno nacional una comisión interinstitucional que verifique los daños causados por esta aspersión aérea de químicos de manera indiscriminada e inconsulta que afecta los derechos fundamentales de nuestro pueblo Afrodescendiente, principalmente a nuestros niños y niñas y el sustento alimentario de la población.
Esta solicitud la hemos realizado hoy en el marco de la reunión de las medidas cautelares.
Nosotros hemos denunciado como la no titulación legal colectiva ha propiciado la ocupación de personas ajenas a nuestro territorio, que han comprado ilegalmente predios, que han iniciado siembras de coca. Hemos dicho como cuando se militarizo nuestro territorio, esos ocupantes de mala fe fueron avisados por militares para que se ocultaran o abandonaran el territorio, y luego que ellos abusaron de su poder, regresaron más posicionados estos externos.
Y ahora nosotros somos atacados con estas fumigaciones, así se está atentando contra la posibilidad de nuestra supervivencia, nuestra sobrevivencia como pueblo, y la de nuestro territorio con las vidas plenas.
Somos vida, queremos la vida y lucharemos por ella.
CONSEJO COMUNITARIO AFRODESCENDIENTE DEL RIO NAYA
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