Amenazas a lideresa de restitución
El pasado martes 7 de febrero Yomaira Mendoza, pasadas las 3:00 p.m. al salir de una actividad en torno al Acuerdo Final de Paz entre el Gobierno y la guerrilla de las FARC EP en la Zona Humanitaria de Caño Manso recibió llamada y mensajes amenazantes del abonado celular 3135647441 en la que se le cuestionó el que hubiera regresado a Curbaradó.
En los mensajes cuestionan la vulnerabilidad del esquema asignado por la UNP, saben que en la reunión fue nombrada como veedora del proceso entre gobierno y FARC en las Zonas de transición.
En la amenaza se precisó que eran 300 armados que iban a actuar contra los reclamantes de tierras y el camino estaba abierto gracias a la dejación de armas de las FARC.
Yomaira desde 2014 ha sido blanco de operaciones de persecución por despojodares y beneficiarios de operaciones paramilitares desde 1996.En horas de la mañana, a eso de las 9:40 a.m. Yomaira se encontró con el administrador general del empresario, ganadero y ocupante de mala fe, Jesús Antonio Lopera, uno de los responsables del despojo de tierras.
Ante la gravedad de la amenazas Yomaira puso en conocimiento a funcionarios de la Unidad Nacional de Protección, a la funcionaria de la Unidad de Restitución de Tierras Catalina Toquica.
Los funcionarios de la Fiscalía y de la SIJIN se negaron a recibir la denuncia argumentando falta de competencia, remitiendo a Yomaira a la estación de policía de Pavarandó.Ante la ausencia de garantías de protección Yomaira se desplazó por tercera vez desde este día.El viernes pasado regulares adscritos a la Brigada 17 a las 2:00 p.m. ofrecieron dádivas a tres estudiantes del colegio AFLICOC mientras se encontraban almorzando en el sector del Puerto de Brisas de Curbaradó.Los efectivos regulares, quienes de manera insistente ofrecieron a los jóvenes un salario de $350.000 y estudio gratis si se enlistaban en el ejército.
Los militares expresaron que las cosas en el ejército estaban relajadas, y muchos soldados se estaban retirando.Ante las propuestas, los jóvenes intimidados, se retiraron del lugar para continuar con su jornada de estudio dentro de la Zona Humanitaria de Camelias.
Bogotá, D.C febrero 10 de 2017
Comisión Intereclesial de justicia y Paz