JHON JAIME ROMAÑA DENIS

JHON JAIME ROMAÑA DENIS, 121 días de injusta privación de la libertad en la cárcel de Apartadó – Antioquia, falsamente acusado de ser miembro de la guerrilla de las FARC EP, dentro del proceso No. 2022, en el cual se ha ordenado la captura de 23 miembros más del Consejo Comunitario de Jiguamiandó y Curvaradó.


Los afrodescendientes y mestizos de los consejos comunitarios, que desde sus Zonas Humanitarias han afirmado y exigido sus derechos ante el Estado, frente a la implementación de proyectos agroindustriales como el de la palma aceitera, dentro de territorios colectivos y propiedades privadas de estas familias, reciben como respuesta su judicialización basada en testigos mentirosos.

La exigencia justa de los derechos por parte de estas comunidades, pretende ser deslegitimada a través de la estigmatización y judicialización, obstaculizando sus procesos de resistencia civil popular y favoreciendo los intereses económicos de quienes se han beneficiado del desplazamiento y las múltiples violaciones a los derechos humanos, con la implementación del monocultivo de palma aceitera.

La defensa de la vida y el territorio, por la que han optado JHON JAIME y su comunidad, es objeto de exhaustivas investigaciones penales, mientras los crímenes de lesa humanidad de los que han sido víctimas, la usurpación de las tierras y la destrucción ecológica no ha merecido interés por parte del Estado, en aras de hacer efectivos los derechos a la Verdad, Justicia y Reparación.

Han pasado 121 días de la injusta prisión de JHON JAIME y se reúnen ya los elementos esenciales para su libertad provisional. La defensa elevó la solicitud correspondiente al Fiscal instructor, el cual será resuelto próximamente.

Desde la injusta prisión un mensaje de JHON JAIME.

Bogotá, D.C 25 de mayo de 2006
COMISION INTERECLESIAL DE JUSTICIA Y PAZ

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CARTA DE JHON JAIME, Desde la Injusta Prisión:

“Soy un campesino, vivía en la comunidad de Caño Seco y pertenezco a la Zona Humanitaria de Bella Flor-Remacho de la cuenca del río Jiguamiandó. Me dedico como agricultor, mi familia la conforma mi compañera y una hija de doce meses de edad; soy representante legal del Consejo Comunitario Menor de Caño Seco y vocal de la junta del consejo Mayor de la Cuenca de Jiguamiandó. Soy promotor de salud, recibí capacitación de Paz y Tercer Mundo -PTM- , además recibí formación como microscopista por parte de la alcaldía de Murindó.

El 26 de enero de 2006, cuando llegué a Murindó a vender una madera para mi sustento y a registrar a mi hija, fui detenido por miembros de la Policía Nacional, me dijeron que tenía orden de captura y que estaba “detenido hasta nueva orden”, pero no me explicaron los motivos de mi detención. Permanecí privado de la libertad en la estación hasta el día siguiente cuando a la 4:00 de la mañana me trasladaron de Murindó a Turbo en una embarcación del Ejercito, durante el recorrido en el río Atrato permanecí esposado.

Me llevaron al Puesto de Policía de Apartadó, me explicaron que estaba detenido por rebelión, posteriormente me llevaron a la cárcel de Apartadó. Desde el 26 de enero a las 12:00 horas hasta el 27 de enero a la 6:00 p.m. no me dieron alimentos. Desde esa fecha he estado enfermo y no he recibido ni una sola pastilla.

Es una injusticia que están haciendo conmigo y con la comunidad, somos campesinos trabajadores que sustentamos nuestras familias; este proceso es porque nos quieren quitar nuestras tierras, nuestro territorio para sembrar palma; pero nosotros seguimos resistiendo. Pido que no ayuden a defender nuestro territorio y los derechos que tenemos como comunidad”.

Jhon Jaime