Informe- Secuestro y agresión física a indígenas de la Comunidad Wiwa de El Limón Carrizal por las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada. Guajira

El pasado miércoles 11 de septiembre, hacia las 3:00 p.m., dos jóvenes indígenas del pueblo Wiwa LUIS ELIAS NIEVES MENDOZA y DEIVI GÓMEZ quienes regresaban a su resguardo en motocicleta, fueron obligados a detenerse por hombres armados de las Autodefensas Conquistadores de la Sierra Nevada-ACSN, en un retén ilegal a 2 kilómetros de la comunidad, donde los retuvieron por casi una hora.

Los hombres armados preguntaron a uno de los jóvenes si era el hijo del profesor Luis Nieves, el joven dijo que no. Otro armado, manifestó: “porque te niegas, si te conozco, tu eres el hijo del profesor”. Los insultaron, procedieron a golpearlos fuertemente y pasada una hora los dejaron ir, advirtiéndoles: “nosotros los tenemos controlados, estamos pendientes cuando alguien sale de la comunidad, sabemos a dónde salen y a que salen”.

Jueves 12 de septiembre, otro joven de la comunidad, EDUARDO ENRIQUE JOÑO CALVO también fue retenido en el mismo retén que retuvieron a LUIS Y DEIVI el día anterior, EDUARDO también fue objeto de agresión física.

Estos hechos incrementan el temor en la comunidad indígena que se encuentra confinada en medio del control extremo al que está sometida, sin garantía alguna de sus derechos fundamentales.

Nuestra comisión recibió información según la cual el pasado miércoles 04 de septiembre LUIS EDUARDO MOJICA indígena de la comunidad Wiwa, hacia las 7:30 a.m., fue abordado por hombres fuertemente armados de las ACSN, quienes procedieron a llevárselo. Al percatarse de esta situación la comunidad decidió ir en búsqueda del joven. Llegaron a un punto donde constataron que LUIS EDUARDO estaba en poder de las ACSN. Al exigir la libertad del joven los armados manifestaron que lo estaban investigando y que pronto lo entregarían a una misión humanitaria.

24 días después de este hecho, el sábado 28 de septiembre LUIS EDUARDO MOJICA fue dejado en libertad por parte del grupo armado ilegal, configurándose el delito de secuestro según informó la fiscalía: “La Fiscalía determinaría este hecho como noticia criminal por secuestro simple”.

La comunidad indígena Wiwa de El Limón Carrizal se ha visto forzada a desplazarse en dos ocasiones, la primera por la masacre ocurrida en 2002 y la segunda el 25 de febrero de 2024 debido a los enfrentamientos entre grupos armados ilegales.

El regreso al territorio se dio el pasado jueves 28 de agosto después de vivir en condiciones precarias sin la debida atención institucional durante 5 meses en albergues en la ciudad de Riohacha. Desafortunadamente y como es costumbre, no se garantizaron las condiciones para la permanencia de la comunidad en su territorio.

Estos lamentables hechos, ocurren en medio de los constantes patrullajes de la Fuerza Pública del Distrito Militar No. 45 de Riohacha con el Batallón Mecanizado No. 6 Cartagena, sin que se garantice la seguridad y libertad de las comunidades sometidas al control socio territorial por parte de grupos al margen de la ley.

Es urgente que el gobierno nacional adopte las medidas efectivas para garantizar la protección y la vida de la comunidad Wiwa, quienes se encuentran confinados y silenciados en su caserío con restricciones a la movilidad y la comunicación.

El Estado colombiano ha sido incapaz de garantizar la seguridad y el bienestar del pueblo Wiwa, a pesar de los compromisos adquiridos tanto en la reunión de seguimiento de medidas cautelares realizada en el mes de febrero como en las mesas técnicas creadas para la atención a la emergencia humanitaria y a las garantías para el retorno seguro al territorio.

Urge la presencia de entidades de Estado y gobierno en el territorio para verificar y resolver la crisis humanitaria que padece la comunidad de El Limón Carrizal.

La Paz debe ser la garantía de permanencia para las comunidades étnicas y campesinas, no una vana ilusión que encubra la creciente vulneración de los derechos humanos de la población.

Con profundo dolor de patria,

Comisión Intereclesial de Justicia y Paz.

 

 

 

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