Eduardo Avila

Por Gladys Ávila Fonseca, hermana de Eduardo.

Y nosotros los familiares y amigos, seguimos esperando que se conozca la Verdad de los hechos de su Desaparición, quienes realizaron este atroz delito, por que lo desaparecieron, por que nos privaron del derecho a compartir sus sueños, su vida, esperando que algún día se haga Justicia, con “aquellos asesinos de la vida”, pero sobre todo seguimos evocando su memoria.

Recuerdos que están intactos después de 15 años de espera, con la misma fortaleza y compromiso para continuar en la lucha, como algún día el nos enseño, fechas como esta nos obligan una vez mas a recordar, aquel día….el 20 de abril de 1993, cuando salimos de casa, hacia el centro de Bogota a realizar algunas gestiones, Eduardo continuo en el bus de servicio urbano a cumplir una cita en el norte de Bogota, fue el ultimo adiós, el beso de una despedida que jamás olvidaremos, por que a partir de ese día; en casa no se volvió a sentir la alegría compartida y el vacío por su ausencia cada vez mas profundo.

Seguimos preguntado, por que no existe un proceso que busque una verdadera justicia, como en presencia de dos miembros de la policía de la estación de chapinero en Bogota fue desaparecido Eduardo Ávila, ante quienes se identificaron los hombres que se lo llevaron como miembros de la SIJIN, como en presencia de la policía un hombre fue golpeado, torturado, y metido a la fuerza en un carro, sin que hasta hoy su familia obtengamos una respuesta y solo existan unos archivos en fiscalia de un caso cerrado.

Pero mas allá del como y los por que, existen mas preguntas, quien se atreven a negar que existimos victimas del crimen de Estado en Colombia, que miembros de seguridad del Estado Colombiano en compañía de sus amigos y aliados los paramilitares Desaparecen, torturan, asesinan, desplazan, amenazan, persiguen, ante la presencia inerme del mundo.

Hoy cuando vemos en los medios de comunicación las confesiones cínicas de asesinos, que ocupan las primeras paginas, los familiares de las victimas no sabemos si sentir horror o indignación, viendo pasar los días en los cuales nos quieren obligar a olvidar, un día es noticia, el siguiente es solo un vago recuerdo de las atrocidades, lo mas grave son solo partes de historias que no llegan a una conclusión, por que mientras de manera desvergonzada cuentan sus hazañas, mas allá de eso no existe la verdadera verdad de las victimas y el Estado Colombiano no responde alas necesidades y exigencias de un pueblo que lleva muchos años obligado a callar.

Pero como pedir que se nos diga la verdad, que se castigue a los responsables, si desde el mismo gobierno se emiten comunicados transmitiendo el inmenso dolor por aquellos responsables de dichas atrocidades, por los auspiciadores de los paramilitares, responsables de múltiples delitos, como el primo del presidente Colombiano. Sin embargo cuando este mismo (el presidente) se pronuncia reconociendo nuestro dolor como victimas por cada detenido-desaparecido? Cuando solo encontramos como respuesta a nuestra denuncia la persecución, las amenazas y quien se atreve a denunciar es obligado a callar, hasta cuando se reconocerá la ilegitimidad de este gobierno.

Hoy mas que nunca las victimas debemos ser escuchadas, en Colombia y el mundo, recuerden que desde hace años venimos denunciado los vínculos del Estado con los paramiliateres, la filtración de estos dentro del congreso y nunca se dio la importancia a nuestra verdad, hoy los hechos hablan por si solos y nos dan la razón, no esperemos a tener mas victimas.