Desmantelan campamento de trabajo esclavo de multinacional
130 personas, entre ellas unos 30 niños y adolescentes, eran explotadas por Nidera, empresa del ramo de alimentos. Se estima que habría mil trabajadores en condiciones similares.
Investigaciones por evasión fiscal en Argentina sacaron a la luz que la transnacional agropecuaria Nidera, líder interna en la producción de semillas, emplea jornaleros en condiciones de esclavitud.
Una pesquisa realizada el pasado 30 de diciembre en la localidad de San Pedro confirmó que la firma explotaba el trabajo esclavo de adultos y niños traídos desde provincias del norte del país, reseñó el diario Página 12.
Dormían hacinados en traileres de chapa metálica, la jornada laboral era de 10 horas diarias al sol, sin agua potable salvo la que recibían en baldes y no podían salir de los límites de la propiedad donde realizaban su faena, explica el rotativo.
Sujetos a contratos informales, tampoco conocían cuál sería la remuneración final y mientras llegaba la fecha del cobro, les iban descontando por todo lo que consumían, alimentos, productos de aseo y otros insumos de primera necesidad.
El único dinero que recibieron en las tres semanas transcurridas antes del allanamiento, fueron 12 pesos (unos tres dólares estadounidenses) “para comprar pan dulce”, explica el reporte.
Según el ministro de Trabajo en la provincia de Buenos Aires, Oscar Cuartango, los hechos descubiertos rozan el crimen de lesa humanidad.
El campamento alojaba a 130 personas, entre ellas unos 30 niños y adolescentes, pero la justicia considera que hay por lo menos un millar en las mismas condiciones, en otros campos próximos a San Pedro, destaca la prensa nacional.
Según publica este martes Página 12, el fiscal actuante, Rubén Darío Giagnorio, presume que “hay por lo menos una organización criminal dedicada a reclutar personas con destino a trabajo esclavo, no sólo para Nidera, sino para otros establecimientos rurales”.
Nidera es la empresa que la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos) denunció por evasión de 260 millones de pesos entre 2005 y 2009.
Posiblemente, las agrupaciones criminales operan en los territorios norteños de Santiago del Estero y Tucumán, de menor desarrollo socioeconómico, donde consiguen mano de obra barata para las faenas agrícolas.
Estimaciones oficiales también señalan probables contactos de los contrabandistas con empresarios del sector, radicados en las provincias de Buenos Aires y Mendoza.
El ministro de Trabajo bonaerense, Oscar Cuartango, admitió que “periódicamente detectamos casos como éste”, reseñó Página 12.
La titular de la Oficina de Trata del Ministerio de Justicia, Zaida Gatti, explicó que “reclutan gente que no tiene para darles de comer a sus hijos”.
En el caso del establecimiento de Nidera, lo que encontramos “fue peor que lo imaginable”, estimó la funcionaria.
El fiscal Giagnorio confirmó que “las 120 personas, que vivían en condiciones infrahumanas en el establecimiento rural de la firma Nidera, ya regresaron a sus domicilios en Santiago del Estero”.
Dentro de ese territorio, consideró, “hay todo un sistema de reclutamiento, lo cual permite hablar de una organización criminal”.
“Se trata de organizaciones dedicadas a reclutar y reducir a servidumbre para distintas empresas”, precisó.
Casos similares afloran recurrentemente en Argentina, a cuenta de intereses empresariales y necesidades de gente pobre urgida de empleo, atestiguan dirigentes de organizaciones campesinas.
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