Desaparecidos del Palacio de Justicia
Memoria y Justicia
El administrador y siete trabajadores de la Cafetería del Palacio de Justicia, más tres visitantes ocasionales, fueron desaparecidos, sus nombres:
CARLOS AUGUSTO RODRÍGUEZ VERA
CRISTINA DEL PILAR GUARIN CORTES
BERNARDO BELTRÁN HERNANDEZ
ANA ROSA CASTIBLANCO
LUCY AMPARO OVIEDO
DAVID SUSPES C.
NORMA CONSTANZA ESGUERRA
LUZ MARY PORTELA LEON
HECTOR JAIME BELTRÁN
GLORIA ESTELA LIZARAZO FIGUEROA
GLORIA ANZOLA DE LANAO
Hoy hace 22 años, el Palacio de Justicia ubicado en la Plaza de Bolívar del centro de Bogotá, fue ocupado antes del medio día por una columna de 35 insurgentes del Movimiento 19 de Abril -M-19-, que con su acción militar pretendió realizar un juicio político al entonces Presidente de la República, doctor Belisario Betancourt por el fracaso del proceso de negociación.
La respuesta fue un ataque militar de las Fuerzas Militares con un saldo de 43 civiles, 33 guerrilleros muertos. 11 miembros de las Fuerzas Armadas y del DAS muertos por la guerrilla del M-19. 11 civiles desaparecidos y la militante del M-19 desaparecida, y dos estudiantes torturados.
Hoy familiares y amigos conmemoran 22 años de búsquedas, de afirmación de la memoria, de persistencia en la búsqueda de la Verdad, de la Justicia y la Dignificación de la historia de sus seres queridos. Eran seres humanos con sueños, con abrazos, con vidas en un porvenir.
Se revivió el ritual doloroso, de tantos y tantos años que no termina. Hay días cuando a veces se pierde el sentido y la esperanza, cuando el olvido logra sepultar los ánimos, pero aún en el dolor se juntan, en la esperanza se unen, y siguen una y otra vez exigiendo verdad y justicia. Ayer en la fuerza de lo espiritual y en el caminar inagotado en la Plaza de Bolivar, Hoy con un mural que se instaló en la plaza de Bolivar, en el mismo lugar en que ellos ingresaron con vida.
22 años de memoria de padres y madres, de hermanos, hermanas, de esposas y esposos, de hijos e hijas de los desaparecidos. 22 años en los que muchos de los familiares de los desaparecidos ya no están con ellos, han partido con dolor, con llanto, con la ausencia del último abrazo de sus seres arrebatados en el camino de la noche y de la niebla. Padres y madres de los desaparecidos ya han fallecido anhelando justicia, afirmando la verdad y la memoria. Han dejado un legado a las siguientes generaciones.
Hoy 22 años siguen escuchando su voz honda y profunda, entre las trizas del recuerdo, entre el paso del tiempo, entre el viento y la música que los trae en este tiempo.
Hoy parece renacer alguna de las esperanzas en una investigación penal que adelanta la Fiscalía General de la Nación en la que se han vinculado al Coronel ® ALFONSO PLAZAS VEGA, quien se encuentra detenido en el casino del Cantón Norte de la ciudad de Bogotá, en espera a que la Fiscalía le defina su situación jurídica por los delitos de secuestro y desaparición forzada. El Coronel ® EDILBERTO SANCHEZ RUBIANO, y los militares en retiro OSCAR WILLIAM VÁSQUEZ RODRÍGUEZ, LUIS FERNANDO NIETO VELANDIA, FERNEY ULMADRIN CAUSAYA Y ANTONIO RUBAY JIMENEZ GOMEZ, detenidos y llamados a juicio por los delitos de secuestro y desaparición forzada, a partir de la resolución de acusación de la Fiscalía del pasado 28 de septiembre. Aún no hay ningún sentenciado. Pero la verdad viene siendo descubierta como la ejecución sumaria del Magistrado CARLOS HORACIO URÄN, quién salió vivo del Palacio de Justicia. El Magistrado fue asesinado por los militares y luego ingresado al mismo lugar en donde fue presentado en los reportes oficiales con la pretensión de ocultar y allanar el camino de la impunidad.
La Fiscalía compulsó copias para que se investigue la responsabilidad del ex presidente BELISARIO BETANCUR CUARTAS y de los Generales en retiro RAFAEL SAMUDIO MOLINA y JESUS ARMANDO ARIAS CABRALES en los hechos del Palacio de Justicia.
El ex presidente BETANCUR, aunque reconoció ante los medios en 1985 “asumo toda la responsabilidad sobre los hechos sucedidos en el Palacio de Justicia”, ahora expresa que no tuvo conocimiento de lo sucedido en la “recuperación” del Palacio por parte de las fuerzas militares. Una y otra vez se ha demostrado que el caso del Palacio de Justicia, los militares son factor de poder real que asumen permanentemente su insubordinación al poder civil, que les teme o que les conciente..
Militares detenidos, algunos llamados a juicio, otros ad portas de que se les inicie investigación por la Cámara de Acusaciones de la Cámara de Representantes y el Fiscal General de la Nación. Pero aún no hay condenados, si en Derecho de obrara, hace mucho tiempo habrían sido condenados.
Pero hoy muchos de ellos, de los criminales de Lesa Humanidad no pueden alzar tan simplemente la voz. O no pueden tan simplemente decir que no sabían o que todo fue por defender la democracia.
Hoy muchos de los colombianos conocen sus rostros, desconocen sus historias militares, casi siempre, siniestra, porque han sido los familiares de los desaparecidos del Palacio de Justicia, quiénes con su persistencia han logrado develar ese tramado de impunidad y de responsabilidad. Son ellas y ellos los que gracias a su insistencia hoy han destapado la podredumbre institucional, retomando ellos y sus abogados los caminos trasegados con Eduardo Umaña, espíritu que ánima las actuaciones en Derecho.
La Justicia Ordinaria hace 22 años inició la respectiva investigación penal, remitiendo las actuaciones correspondientes a los militares implicados en los hechos a los Tribunales Castrenses para su “enjuiciamiento” por estos, que como siempre culminó en absoluciones. Desde hace dos años se reinició la investigación penal vinculando a algunos militares hasta hace poco intocables como el Coronel ® ALFONSO PLAZAS VEGA, pero aunque no ha sido condenado, no es el único responsable. Pero él ni los otros implicados, la línea de mando, han sido capaces de decir: ¿EN DÓNDE SE ENCUENTRAN LOS DESAPARECIDOS DE LA CAFETERÍA DEL PALACIO DE JUSTICIA?
La Procuraduría hace 22 años adelantó una parsimoniosa investigación. Cinco años después, el Ministerio Público profería un fallo solamente contra dos de los uniformados implicados en los sangrientos hechos. Uno de ellos era el Teniente Coronel ALFONSO PLAZAS VEGA, retirado ya para la fecha de la sanción solicitada.
Hoy los familiares de los desaparecidos continúan andando, con nuevas generaciones, afirmando la verdad que ellos han ido escudriñando y arrancando a la madeja de la impunidad. Exigiendo saber en dónde están los desaparecidos de la cafetería del Palacio de Justicia, y eso a pesar de que los responsables políticos y materiales de los hechos continúan viviendo en una libertad, en la que son presos de su conciencia.
El mayor anhelo de los familiares sigue siendo saber dónde están sus desaparecidos, hallarlos, recuperarlos y afirmar su derecho a enterrar, a llorarlos sobre una tumba. Así lo expresa una de las hijas, hoy de 22 años de edad, escribiéndole a su padre Carlos Augusto:
“Hoy me desperté amando la vida y dirigí una mirada al cielo, hice formas con las nubes y jugué con ellas un rato, el día pasó, en medio de sol y lluvia y finalmente llegó la noche, con su luna redonda, en todo su esplendor, la contemplé e inmediatamente tú invadiste mi cabeza y te sentí en todo mi ser, eso me dio nostalgia porque me llevó a indagar en mi pasado y recordé tu historia, recordé que un día en la mañana te despediste y me diste adiós, un adiós eterno que poco a poco se fue convirtiendo en la esperanza del abrazo que faltó.
No estás, intento recrearte en mi mente, pintarte con los esbozos que todos me dan de ti y es complicado porque inevitablemente tengo que pensar en tus últimos días y en cómo los viviste, y no sabes cuánto me gustaría saberte muerto y enterrado, haber podido llorarte y tener un lugar al cual llevarte flores”. Alejandra Rodríguez
Bogotá, D.C., 6 y 7 de noviembre de 2007
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz