Continúa la siembra ilegal de palma extensiva
La compañía Poligrow está implementando el agronegocio de palma de aceite en proyecto de 70 mil hectáreas en Mapiripán. Este proyecto tiene graves irregularidades que desconocen las dipsosiciones legales sobre baldíos, sobre Unidades Agricolas Familiares y el despojo violento
En la finca Santa Ana sin que se haya terminado el proceso legal de sucesión del predio de la familia Aljure avanzan las plantaciones de palma. En esa propiedad los trabajadores de Poligrow manifestaron que ingresaron a la propiedad porque su jefe ” italiano nos metió con GPS y nos dijo que estaba dentro de su propiedad”.
Los trabajadores se refieren a Carlo Vigna, empresario italiano, representante de la compañía.
Otra de las irregularidades en la adquisición de las tierras es que algunas de ellas se ocuparon luego de las operaciones de estructuras paramilitares, según afirman pobladores de la región. En Mapiripán en los 90 los paramilitares consumaron dos masacres colectivas. Adicionalmente, existió una intervenciòn directa para el uso de algunas de las grandes extensiones de tierra del famoso “Cuchillo”.
En Barandales los habitantes tradicionales se vieron obligados al desplazamientos por las operaciones paramilitares y con posterioridad, denuncian las víctimas, a finales de 2009 se “legítimo” el despojo con la intervención de policía, ejército y funcionarios de la alcaldía municipal de Mapiripán. Algo similar atestiguan sobre lo ocurrido en la Finca Las Toninas.
El resultado siempre ha sido el mismo, la empresa Poligrow se ha hecho a predios rurales para su agronegocio con serios vicios de legalidad
Este proyecto se inició en la finca Macondo donde contra las disposiciones legales, la compañía adquirió tierras que exceden la extensión de la Unidad Agrícola Familiar.
Poligrow empresa italo-española desde 2008 llegó a la región y alega que sobre la hacienda Santa Ana firmó una promesa de compraventa con los herederos del guerrillero liberal Dumar Aljure.
Familiares herederos han alegado igualmente que existe un proceso de sucesión estancado en San Martin y nunca ha dado poder alguno para realizar transacción alguna sobre el predio.
Bogotá,D.C. abnl 14 de 2014
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz