Continúa desplazamiento gota a gota
Otro desplazamiento forzado por operaciones paramilitares se produjó en Curbaradó.
En horas de la tarde, un grupo de paramilitares entre ellos el mando, llamado “El Mono”, ingresaron a la propiedad de la familia Solipaz, del consejo comunitario de Buena Vista, en donde instalaron un campamento. La exigencia de retiro del lugar fue desconocida del grupo armado.
Los paramilitares preguntaron por los líderes de la Zonas Humanitaria El Tesoro, en particular, preguntaron por el líder Nevys Ñanes y si había regresado de Bogotá. Nevys estuvo participando en reuniones con el gobierno demandando protección.
Por la presión y ocupación paramilitar la familia se vio obligada a desplazarse.
Ayer mismo, la familia de Álvaro González se vio obligada a desplazarse por las amenazas de los paramilitares
como consecuencia de la desaparición forzada de su tío Everto González.
Igualmente, el poblado de Villa Luz en Curbaradó los paramilitares presionaron a la comunidad para que esta recibiera dinero de las siembras de coca, el tráfico de drogas para pagar los docentes. Las presiones paramilitares tienen sitiada a esta comunidad\
La ausencia de garantías para la protección de los reclamantes de tierras es evidente.La complicidad y tolerancia de la brigada 17 con las operaciones paramilitares es evidente. Aún se encuentran 200 paramilitares en Jiguamiandó entre Bella Flor Remacho y Santa fe de Churima y Santa Rosa del Limón y entre Cetino y Villa Luz en Curbaradó cerca de 300.
Bogotá, D.C. agosto 5 de 2011
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz