Comunicado público sobre cancelación de acto de perdón-Inzá
Broederlijk Delen lamenta la cancelación unilateral y sin motivo serio del acto de perdón por parte del ejército hacia las familias víctimas de ejecuciones extrajudiciales en Belén, municipio de Inzá, en el Cauca.
Comunicado público
Bruselas, 23 de febrero de 2012
La organización belga de cooperación al desarrollo Broederlijk Delen apoya desde hace varios años el trabajo de la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz en el Cauca, en particular el acompañamiento a los familiares de las víctimas de la ejecución extrajudicial cometida por miembros del ejército nacional de Colombia el 8 de enero de 2006 en la vereda Belén en el municipio de Inzá. Este acompañamiento se ha hecho para reivindicar los derechos de las víctimas a la verdad, la justicia y la reparación integral. La comunidad ha realizado un trabajo de memoria que se ha formalizado en la casa de la memoria “Refugio del Saber”.
Como fruto de la lucha de la comunidad y del proceso administrativo contra el batallón Cacique Piguanza, responsable del crimen, el juzgado 8 administrativo de Popayán ordenó que el ejército presentara un acto de perdón público por las ejecuciones extrajudiciales de Manuel Antonio Tao Pillimue y Hortencia Neyid Tunja y por las lesiones y posterior montaje judicial contra William Cunacue.
Este acto de perdón había sido acordado entre el Batallón Cacique Piguanza y los familiares de las victimas para el día 17 de febrero de 2012. La noche anterior, mediante un mensaje de texto de un teléfono celular, el teniente Herrera responsable del área jurídica del batallón Piguanza comunicó a la abogada Martha Lopez quien representa a las víctimas en la parte administrativa, que el batallón cancelaba el acto, por razones de seguridad en la zona.
Broederlijk Delen hizo presencia en el lugar previsto del acto el 17 de febrero y pudo constatar que no había ningún problema de seguridad ni presencia de grupos armados ilegales ese día. En consecuencia consideramos una falta de respeto hacia las víctimas la cancelación a última hora y sin razones serias del acto por el cual los familiares de las víctimas se venían preparando desde hace varias semanas.
Nos preocupa que estos hechos se den en un momento en el cual el ejército nacional y el mismo presidente de la República Juan Manuel Santos han expresado un rechazo abierto hacia la sentencia judicial contra el Coronel Plazas, que ordena al ejército pedir perdón a las víctimas por los crímenes cometidos durante la retoma del Palacio de Justicia en 1985.
Llamamos al gobierno nacional, a través del Ministerio de la defensa, a acatar sin más dilataciones el acto previsto por el tribunal administrativo de Popayán y acogerse a la nueva fecha propuesta por la comunidad del 10 de marzo 2012. Llamamos igualmente a que el acto se desarrolle en un espíritu de sincera reparación a los familiares y a la comunidad, el cual empieza por un profundo respeto por parte del ejército a sus víctimas. De lo contrario, estaríamos ante una re victimización inaceptable.
Apoyamos la solicitud de los familiares de las victimas de que haga presencia el Presidente Juan Manual Santos, para transmitir un mensaje de solidaridad del Estado con las víctimas de sus agentes.
En coherencia con el discurso de respeto a los derechos humanos del gobierno, el gobierno debería suspender inmediatamente a miembros del ejército implicados en este crimen, mientras se defina su situación penal.