Carta de Eduardo Martínez Quiroz Gestor de paz del ELN a Jesús Santrich

Apreciado Hermano Jesús Santrich:

Amigo y hermano de lucha, para responder tu amable carta, porque sé de tus ideas y sentimientos que has tratado de compartir a la distancia; nosotros acompañarte en ésta “TU ÚLTIMA BATALA”, por la dignidad y libertad, tanto tuya como la de todos/as por un nuevo país en paz y equidad.

Al iniciar ésta nota recordé a Antístenes, discípulo de Sócrates, fue el prototipo del sabio a ustero y solitario, creador de la escuela emblemática de los cínicos (escuela filosófica práctica de la antigua Grecia, de liberarse de los caprichos de la fortuna, por llevar una vida espiritual de conocimiento, llena de humildad hacia la felicidad), con una confianza radical de enaltecer el SER, que luego sería llevado a la pantalla por el humorista mexicano Roberto Gómez Bolaños, como el “Chavo del ocho”. Cierto día Antístenes llegó donde el médico a la consulta para que le quitara un dolor físico y moral, el médico le dijo que no tenía el remedio y el paciente tomó su cuchillo y se lo pasó al médico, para indicar que prefería morir antes de seguir tolerando el dolor que tenía. Así comparo tu decisión ante la injusta extradición.

El monstruo bíblico o “leviatán” como lo denominó Thomas Hobbes filósofo inglés en 1651, en pleno feudalismo, al Estado, bárbaro y cruel, junto el imperio en cabeza de Trump, te cobran ahora tu rebeldía e insurgencia que surgió de la exclusión institucional, más por la radical postura en la mesa de la Habana, fuiste el que lideraste y no cedías a la humillación y sumisión. En especial la dejación de las armas y la correspondencia al cumplimiento de los acuerdos. Tuviste al espadachín mayor Sergio Jaramillo, quien se ensañó contigo, como Goliat contra David, usaste en varias ocasiones tu honda, que es el verbo, la palabra crítica y certera con talento; tu bastón solo para guiar tu ceguera, que algunos de la élite no la creen, como tu inocencia. Ahora en manos del sanedrín del Fiscal y la DEA, y lo peor de la firma del hijo político del energúmeno, que ya amenazó ante la primera prueba estarías en tierra de los mayores consumidores de narcóticos, de combustibles fósiles, y fabricantes de armas: EEUU.

Algunos de los cafres y en especial los mafiosos, siguen convencidos que el país es el mismo, incluso creen que es igual al del 2010, el de la “seguridad democrática”, cuando en los “consejos comunitarios” copia de “aló presidente”; donde el energúmeno quien odia, no reconoce, ni escucha la existencia de otros/as, pretendía resolver asuntos cotidianos, de pimpinas de gas, tejas y cemento con los incautos. No asuntos estructurales del país para hacer participar a las comunidades en debates y decisiones soberanas; hoy creen que las consultas populares y ambientalistas son de locos y revoltosos; a la comunidad de LGTBI no los ven como sujetos de derechos, sujetos sociales y políticos; para ellos son enfermos psicológicos y endemoniados. Los defensores de DDHH o líderes sociales había que hacerles chuzadas para justificar la judicialización y encarcelarlos. Como la guerra no se ganaba a los tiros y en combates con la insurgencia, se inventaron los “falsos positivos”, asesinando a inocentes campesinos o pobladores y los vestían de guerrilleros para difundir la matriz mediática, como “muertos en combate”; afortunadamente, hoy varios militaresvalientes como el coronel retirado de la policía Omar Eduardo Rojas con 31 años de servicio, documentó en su libro las pruebas de más de 10.000 casos de ejecuciones extrajudiciales. Igual se inventaron infinidad de métodos de guerra sucia para despojar a los campesinos de sus tierras y apropiarse de ellas, más de 10 millones de hectáreas se las robaron. Muchos héroes surgen, valientes como el sacerdote guadalupano de Cali Ramiro Arango, intelectuales, comunicadores, maestros, estudiantes para decir las verdades y solidarizarse por el otro/a. Claro los bárbaros y crueles le temen hoy a la verdad, y una parte del pueblo le tiene miedo aún al verdugo, el Estado. Sin verdad no será posible transitar hacia la paz, es mantener un país sin memoria colectiva; es como querer construir la paz con la misma hambre de siempre, debe haber equidad y respeto a la existencia del otro.

Pensaron que el referendo de octubre 2 de 2016, sería el punto de inflexión política negativo para el proceso de la Habana con las FARC y el Gobierno de Santos? O de todo el proceso de paz?; meses antes consideraban algunos que el uribismo estaba moribundo desde las elecciones de alcaldes y gobernadores anteriores. Iván Duque inició su campaña electoral con dos años y medio de anticipación, la ejecutó bajo la visión y esquema de su gestor y apoyado por JJ Rendón: “siembra odio y cizaña, para obtener una sociedad sumisa y obediente”, sin memoria, ni conciencia colectiva. Solo los que son capaces de gozar haciendo sufrir a otro/a, y los que disfrutan con el sufrimiento histórico y social; los que no se sacian de la sangre de los pueblos, es porque desafortunadamente en Colombia desde hace algunos años, los muertos son de un solo lado. No como le ocurrió a Fulgencio Batista o Anastasio Somoza, siendo gobiernos dictatoriales e inquisidores, aquí llevamos una dictadura de mas de 200 años y apenas estamos despertando. Con la salvedad que algunos cafres siguen borrachos del “triunfalismo de que ganaron la guerra”, después de los debates internos en la cátedra militar cuando el ex-gral Álvaro Valencia Tovar demostró, luego de dos ocasiones a la defensiva estratégica, que la única forma de finalizar el conflicto colombiano era por la vía de la solución política negociada.

La gran votación por la confluencia de la Colombia Humana y la coalición de los verdes, liberales y conservadores por la paz y las transformaciones de construir un país diverso e incluyente; en especial el acompañamiento del movimiento social y gremial, los jóvenes e independientes, su organización y movilidad. Los 8 millones de votos son un momento político para resistir, consolidar para avanzar. Nosotros el ELN seguiremos junto al pueblo siempre, acompañando las luchas sociales y políticas de la soberanía, la dignidad, y equidad de los trabajadores, para continuar la vía de la solución política y los cambios hacia la paz. Pese al genocidio de líderes y lideresas sociales y opositores que pasan de más de 300 desde 2016, casi uno diario, la presión social y comunicacional crece junto al acompañamiento internacional.

¿Será posible que regrese el papa Francisco a darnos más aliento sobre la esperanza? O que el reino de Noruega le otorgue otro Nobel a Duque? Qué creen que nos hace falta para finalizar el conflicto y tener paz con equidad?

Mientras piensas en esas posibilidades para salir de las incertidumbres, debo expresar que estamos convencidos en que el proceso de paz debe ser irreversible y no al antojo de ningún gobierno, para eso el país, la sociedad debe asumir construir una política de paz de largo alcance, para que sea el Estado quien la vaya asumiendo en la medida que acepte que debe ir transformándose a esa nueva realidad.

Felicitar tu capacidad de producción literaria y crítica frente a la realidad que vivimos; si pudieras seguir en esa tarea muy buena, pero los gringos jamás te la permitirían; “El Quijote” nació en una cárcel, luego de que Miguel de Cervantes Saavedra fuera preso en seis ocasiones. Te queda tu sabia experiencia de resistir en la huelga, hasta que tu vida aguante, ese es el reto, jamás pienses que estás solo, ni que tu ejemplo será en vano; será la luz que nos llevará a la paz, espero mejor equivocarme. Me quedé para siempre con la sonrisa de Jaime Garzón, que no la pudieron robar los corruptos. Te confieso volví a llorar en éste final trágico que mereces como un gran amigo y hermano de lucha, un abrazo de hasta siempre, que abrigue allá donde mis brazos no alcanzan, tu alma.

Te recuerda y estima siempre con cariño infinito.

Eduardo Martínez Quiroz

Gestor de paz del ELN

La Habana – Cuba, julio 14 de 2018.

Último dibujo de Jesús Santrich desde su sitio de reclusión. Se presentó ante la JEP el viernes 13 de julio por medio electrónico, se le negó comparecencia presencial.

Carta Julio 14. Jesús Santrich by justiciop on Scribd