Carta de Colombianos y Colombianas por la Paz a las FARC y Gobierno Nacional
La paz hoy exige a todas y todos nuestra generosidad y la responsabilidad con las generaciones presentes y futuras ante la posibilidad que el discurso y las prácticas de la guerra sigan negando la construcción de una democracia con justicia social, apuesta que compartimos la mayoría de ciudadanos.
Bogotá, D.C. septiembre 27 de 2013
Doctor
Juan Manuel Santos
Presidente de la República de Colombia
Comandante
Timoleón Jiménez
e integrantes del Secretariado de las FARC-EP
Reciban un respetuoso saludo.
La paz hoy exige a todas y todos nuestra generosidad y la responsabilidad con las generaciones presentes y futuras ante la posibilidad que el discurso y las prácticas de la guerra sigan negando la construcción de una democracia con justicia social, apuesta que compartimos la mayoría de ciudadanos.
El país y la paz requiere que independientemente de nuestras diferencias políticas que dispongamos nuestras voluntades y palabras para que con gestos concretos construyamos acciones y apuestas que ambienten y nos conduzcan por el camino de la paz.
Cuando ustedes se manifestaron en torno a mi participación conducente a la libertad del ciudadano Kevin Scott, expresé que estaba en total disposición para facilitar la concreción de ese gesto humanitario, no para obstaculizarlo.
Quiero comunicar a ustedes nuevamente por escrito, y a todos y todas las ciudadanas (os) de Colombia y de los Estados Unidos, que es para mí imperativo ético y moral la libertad del ciudadano norteamericano y el retorno al seno de su familia, por lo que reitero que declino a ser parte de esta misión humanitaria.
Esta decisión la he tomado desde de semanas atrás en razón de mis convicciones y en un sentimiento compartido con integrantes de Colombianas y Colombianos por la Paz.
De mi parte, estaré trabajando, como siempre ha sido, al lado de los que han sufrido las consecuencias de la guerra, al lado de las mujeres y hombres que tanto hemos persistido por alcanzar la terminación del conflicto armado, a seguir con todas mis fuerzas, mi corazón y mis razones más profundas, hasta que la paz sea una realidad en nuestra democracia.
De toda consideración,
Piedad Córdoba Ruíz
Por Colombianas y Colombianos por la Paz