Ausencia de garantías para Carolina Montaño, privada de su libertad, acusada injustamente del asesinato de un policial
En el centro de reclusión de mujeres en Jamundi, Valle del Cauca, se evidencia una situación de vulneración y ausencia de garantías para las reclusas que se encuentran privadas de su libertad.
Carolina Montaño, enfermera, madre cabeza de hogar, lideresa y vocera de Paso del Comercio (Paso Aguante) quien está siendo relacionada injustamente en la muerte violenta del miembro de policía Carlos Andrés Rincón Martínez.
Ella fue enviada por un juez de control de garantías a detención preventiva el 1 de octubre de 2021, y desde el pasado 6 de octubre fue enviada al complejo penitenciario de Jamundi, siendo llevada por funcionarios de civil de la SIJIN cuando esta es una competencia del INPEC.
Además de ser detenida preventivamente sin cumplir con los presupuestos normativos para dicha medida, desconociendo jurisprudencia del sistema Interamericano de dh, es ahora sometida a un estado de reclusión sin garantías mínimas de dignidad.
Sin transcurrir 10 días desde su llegada al complejo penitenciario se le está negando el acceso de implementos mínimos de aseo, cuidado personal y vestimenta para vivir esta situación injusta con unas condiciones mínimamente dignas.
Hoy desde las 2.00 p.m. funcionarios del INPEC manifestaron que por órdenes del director del plantel, la entrega de estos implementos se debe realizar una vez al mes y sin aceptarse la entrega presencial. Es decir, que Carolina debe esperar hasta el 10 de noviembre para recibir implementos tan básicos como crema de dientes, jabón o toallas higiénicas, y solo hasta el mes de diciembre podrá recibir ropa.
Una situación de esta naturaleza ante las condiciones que implica la privación de la libertad, y en una persona que según la ley goza de presunción de inocencia cuestiona las garantías constitucionales y legales en el trato de las personas privadas de libertad.
Hacemos un llamado a las instituciones penitenciarias para que respeten los derechos humanos de las personas privadas de la libertad de manera preventiva y que se actúe de acuerdo a las garantías de presunción de inocencia y dignidad humana.
Estamos observando un escenario judicial que ha ido trasladando la represión a la criminalización y la gestación de chivas expiatorias en que se descarga la ira, la venganza contra la juventud, la mujer y la afrodescendiente
Bogotá D. C,. 15 octubre de 2021
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz