Artistas por la paz territorial de Chocó, Valle, Putumayo, Cauca y Meta
Entre el 13 y el 15 de Abril 22 jóvenes se reunieron en Popayán, en la segunda sesión de la Escuela de Formación Musical Artistas de la Vida.
22 identidades diversas del Valle del Cauca, Chocó, Putumayo, Cauca y Meta volvieron a reunirse para fusionar sus voces, instrumentos, sonatas en ña producción de música como manifestación de la paz.
La Escuela es parte de creación de un escenario para afrontar las nuevas dinámicas del reclutamiento forzado de niñas, niños y jóvenes al conflicto armado y las nuevas formas de criminalidad.
Entre los cantos, los ritmos y el baile creados por la marimba, el cunuco, el clarinete, la tambora, la guitarra, los guasas, la quena, la caja y la guacharaca se expresan los derechos de los niños en sus territorios, así como, el deber de la memoria, el derecho a la verdad restauradora y las rutas de atención al reclutamiento.
Entre las expresiones de motivación y de presente futuro es del corazón: “Qué nadie apague las ganas de vivir, qué los niños/as puedan jugar y sonreír”, “qué paren las muertes de niñosy niñas y de líderes en el país. que puedan jugar y sonreir” O también la fuerza del arraigo: “qué los jóvenes no tengan que abandonar los territorios por temor a ser reclutados y se les quite la libertad” .
La creación colectiva en homenaje a los 8 niños fallecidos en Alto Guayabal, en la Guajirá y de Samuel es un tributo a la vida de niñas y jóvenes de Colombia que re-crean la paz.
Explican, qué seguirán apostándole a la paz, a la construcción de la reconciliación a través de la música, pues está seguirá siendo la propuesta para sanar los corazones de todos y todas aquellas qué han estado inmersos en la guerra.
La Escuela de Formación Musical Artistas de la Vida es parte de la iniciativa de la Universidad de Paz que coincide con varios mandatos de la Comisión de la Verdad y de las sanciones propias de la Jurisdicción Especial de Paz, JEP, y del propósito de saberes técnicos, tecnológicos y profesionales para el arraigo y la paz territorial con justicia socio ambiental.
“Qué nadie apague el sueño de jugar y sonreír” canción en homenaje a la vida de los niños y niñas qué re-crean la Paz.