Amenaza contra el defensor de los derechos humanos Juan David Díaz Chamorro
El 1 de junio de 2012, el defensor de los derechos humanos, Juan David Díaz Chamorro, recibió una amenaza de muerte a su vivienda, firmada por el grupo paramilitar el “Ejército Anti Restitución”
Juan David Díaz Chamorro es líder del capítulo Sucre del Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado, MOVICE, e hijo del asesinado alcalde de El Roble, Eudaldo Díaz.
El 1 de junio de 2012, aproximadamente a las 22:00 horas, el agente de policía que presta protección a Juan David Díaz Chamorro encontró un paquete en el piso de la terraza de la vivienda del defensor de los derechos humanos, en Sincelejo, Sucre. El paquete contenía diez velas blancas envueltas en un papel y amarradas con una cinta. Una amenaza de muerte, dirigida a Juan David Díaz Chamorro y firmada por el “Ejército Anti Restitución”, escrita en el papel decía: “Quedas advertido y en conocimiento pues te tenemos plenamente identificado y ubicado sabemos que eres uno de los hijueputas que con la excusa de ser defensor de derechos humanos pretenden mediante toda clase de arbitrariedades despojar de sus terrenos a los verdaderos propietarios para que terminen en manos de un puñado de guerrilleros malparidos […] Preocupate por la familia y tomales una foto para que te quede de recuerdos por que tu muerte y la de tu familia esta cerca […]”
El hecho de que esta amenaza fue entregada a su puerta, y en un momento en que el agente de policía no estaba presente, muestra que los autores han estado llevando a cabo vigilancia del defensor de los derechos humanos.
Juan David Díaz Chamorro ha sido víctima de previas amenazas de muerte por parte de grupos paramilitares en abril de 2010, y en junio y diciembre de 2011. Como resultado de las amenazas en su contra, el defensor de los derechos humanos y su familia eligieron salir del país temporalmente antes de regresar en noviembre de 2011. Cuando volvió se enfrentó cargos judiciales que pretendían involucrarlo en actividades paramilitares. Esto fue como resultado de declaraciones hechas por antiguos paramilitares en Sucre, quienes son los mismos que estaban involucrados en el asesinato de su padre. En el marco de la Ley de la Justicia y Paz 975 del 2005, los antiguos paramilitares pueden recibir condenas reducidas a cambio de confesiones completas con respecto a su participación en acciónes paramilitares.
Esta última amenaza contra Juan David Díaz Chamorro ocurre en un contexto de continua persecución contra los miembros del capítulo Sucre del MOVICE. El 8 de mayo de 2012, Ingrid Vergara Chávez, Pedro Geney, Franklin Torres y Jeison Paba Reyes recibieron amenazas de muerte, y el 28 de mayo de 2012, Hermes Verbel Rochas, hermano del asesinado miembro del capítulo Sucre del MOVICE Eder Verbel, logró escapar de un hombre armado que se le acercó en la casa de su hija. Front Line Defenders emitió llamamientos urgentes en ambos casos.
Front Line Defenders considera que la amenaza de muerte dirigida a Juan David Díaz Chamorro y su familia está directamente relacionada con su trabajo en defensa de los derechos humanos y su afiliación con el MOVICE. Front Line Defenders expresa su grave preocupación por la seguridad y integridad física y psicológica de los susodichos defensores de los derechos humanos, así como sus familias.
Dado que Colombia continúa registrando algunos de los más altos niveles de ataques contra defensores de derechos humanos, incluso homicidios, Front Line Defenders reitera que se debe adoptar medidas inmediatas para proteger a aquellos que permanecen en riesgo como resultado de las amenazas de muerte.
Front Line Defenders insta a las autoridades colombianas a que:
1. Lleven a cabo una investigación inmediata, exhaustiva e imparcial sobre la amenaza enviada al defensor de los derechos humanos Juan David Díaz Chamorro y a su familia, con el fin de identificar a los responsables y llevarlos ante la justicia de acuerdo con los estándares internacionales;
2. Llevar a cabo una revisión de las medidas de protección actuales de Juan David Díaz Chamorro, a la luz de la amenaza de muerte reciente, con el fin de aplicar nuevas medidas para garantizar su integridad física y psicológica;
3. Tomen todas las medidas necesarias para garantizar en todo momento la seguridad y integridad física y psicológica de los susodichos, y los otros defensores de los derechos humanos afiliados con el MOVICE;
4. Aseguren que todos los defensores de derechos humanos en Colombia, desarrollando sus actividades legítimas en defensa de los derechos humanos, puedan operar libremente sin miedo a restricciones ni represalias.
7 de junio de 2012