Actuaciones paramilitares contra integrantes de CAVIDA e infracciones al derecho humanitario

Nuestra Constancia Histórica y Censura Ética ante la continuidad de operaciones paramilitares contra los integrantes de los consejos comunitarios del río Cacarica, entre ellos, los asociados en CAVIDA, y la continuidad de afecciones por las operaciones de la brigada 17 sobre bienes de supervivencia y daños a propiedades de civiles.


Bogotá, D.C., 10 de septiembre de 2012

JUAN MANUEL SANTOS

Presidente de la República de Colombia

ANGELINO GARZÓN

Vicepresidente de la República de Colombia

FERNANDO CARRILLO FLÓREZ

Ministro del Interior

RUTH STELLA CORREA

Ministra de Justicia

MARÍA ANGELA HOLGUÍN

Ministra de Relaciones Exteriores

JUAN CAMILO RESTREPO

Ministro de Agricultura

JUAN GABRIEL URIBE

Ministro de Ambiente y Desarrollo sostenible

EDUARDO MONTEALEGRE

Fiscal General de la Nación

ALEJANDRO ORDÓÑEZ

Procurador General de la Nación

JORGE ARMANDO OTÁLORA

Defensor Nacional del Pueblo

SANDRA MORELLI

Contralora General de la Nación

Ref: Actuaciones paramilitares contra integrantes de CAVIDA e infracciones al derecho humanitario

Tan reiteradas situaciones de agresiones, de amenazas, de control sobre el movimiento de bienes y de personas en el río Atrato por parte de paramilitares, como ellos, se autodenominan, es una evidencia de la omisión, cuando no de la tolerancia de batallones fluviales y de unidades por tierra con estas actuaciones que no han sido desterradas desde 1996. Tan coincidente como las operaciones empresariales de Maderas del Darién Pizano S.A. que hoy se desarrollan de manera ilegal dentro del territorio colectivo de Cacarica sin que ninguna actuación preventiva se haya realizado.

La continuidad de hostilidades y actuaciones de persecución contra la guerrilla de las FARC continúa afectando no al movimiento alzado en armas si no a la población civil que habita en el territorio colectivo de Cacarica. Son frecuentes los abusos de autoridad, los daños sobre bienes de supervivencia, las intimidaciones, las amenazas y los daños sobre la integridad física de personas.

Ante ustedes nuestra fundamentación fáctica de las situaciones vividas recientemente por los habitantes de Cacarica.

* Viernes 10 de agosto, en la tarde nuestra Comisión de Justicia y Paz fue informada que días atrás en una de las Zonas de Biodiversidad de la familia OREJUELA, ubicada a 15 minutos de la Zona Humanitaria Nueva Esperanza en Dios, unidades militares de la brigada 17 dañaron siembras de pan coger y hurtaron más de 15 matas de yuca.

Ese mismo día hacia el medio día un joven afrodescendiente fue amenazado de muerte, en el retén que los paramilitares mantienen en Tumaradó, caserío sobre el Atrato. Los armados obligaron a detener la embarcación tipo chalupa en la que se movilizaban más de 20 personas de Turbo a Cacarica. Luego de observar a sus ocupantes, al joven lo acusaron de ser guerrillero y le ordenaron bajarse.

La reacción de los integrantes de la comunidad persuadió a los paramilitares que manifestaron: “váyanse ya, porque si no lo matamos aquí mismo

* Sábado 18 de agosto, a las 9:00 a.m. se escucharon fuertes explosiones entre la Zona Humanitaria Nueva Esperanza y el caserío de Bogotá.

Minutos después sobrevolaron durante seis ocasiones y a baja altura dos helicópteros sobre la zona Humanitaria. Estas acciones generaron pánico y zozobra en las comunidades por desconocer la procedencia de las mismas.

* Domingo 19 de agosto, nuestra Comisión de Justicia y Paz fue informada que el miércoles 8 de agosto, en la Institución Educativa IDEM de Turbo, Antioquia, a las 9:50 a.m., aproximadamente, se desarrollaban dos reuniones sobre procesos de restitución de tierras y víctimas, y sobre afrocolombianos.

Uno de los asistentes a la reunión en tono intimidatorio se acercó a dos de las mujeres demandantes en la Corte Interamericana y les expresó que no iban a permitir realizar más reuniones en el Coliseo, “eso se va acabar”. Y precisó “Justicia y Paz hizó reunión en el coliseo, pero eso se les va a acabar”

En ese lugar deportivo las familias asociadas en CAVIDA y las mujeres cabezas de familia que se reubicaron en Turbo construyeron un Monumento en memoria de los asesinados, los desaparecidos y torturados de Cacarica desde 2000. Allí en las últimas semanas se vienen desarrollando diversas reuniones de los peritos con las víctimas que participan en desarrollo del proceso que adelanta ante la Corte Interamericana por el asesinato de MARINO LÓPEZ y el desplazamiento causado por la operación “Génesis”.

De acuerdo con algunas de mujeres víctimas, ADÁN QUINTO, JAIME BEITAR, EUGENIO PALACIOS en reuniones en Turbo la Comisión de Justicia y Paz aparece como problemática para el desarrollo de las comunidades y aseveran que: “Justicia y Paz se está enriqueciendo a costa de las víctimas”

Agregan QUINTO y PALACIO que la Comisión de Justicia y Paz se ha enriquecido con la plata de los muertos.

* Miércoles 22 de agosto, a eso de las 7:30 a.m. ingresaron tres uniformados adscritos a la brigada 17 a la Zona Humanitaria “Nueva Esperanza en Dios” ocultándose en una huerta casera con sus fusiles en posición de ataque. Al ser descubierto salen del lugar.

* Sábado 25 de agosto, aproximadamente las 6:30 a.m. a cinco minutos del caserío de Bogotá, ubicado a 40 minutos de la Zona Humanitaria “Nueva Esperanza en Dios” se produjeron contactos armados entre tropas de la Brigada 17 y guerrilleros del frente 57 de las FARC.

Como consecuencia de este hecho resulto herida con esquirlas de granada la afrocolombiana AURALICIA QUINTO. La afrocolombiana resultó herida en uno de sus brazos, glúteos y abdomen. Ella se encontraba con su hijo de cuatro años, que resulto ileso.

La joven recibió la primera atención por la promotora de salud, por la gravedad de su estado fue remitida al municipio de Turbo; desde su llegada fue custodiada por efectivos policiales.

* Domingo 26 de agosto, en horas de la mañana a 20 minutos de la Zona Humanitaria Nueva Esperanza en Dios militares de la brigada 17 fueron abordados por integrantes de CAVIDA para que se retiraran del lugar ante la eventualidad que se presenten enfrentamientos que pondrían en riesgo su vida e integridad.

El Teniente RODRÍGUEZ manifestó que se encuentran descansando. El militar preguntó si en la Zona Humanitaria se encontraban las organizaciones de derechos humanos.

Los regulares no se retiraron del lugar.

* Lunes 28 de agosto, a las 10:30 a.m. aproximadamente en el caserío de La Honda, territorio de Cacarica, a la orilla del Atrato cinco afrodescendientes fueron obligados a detenerse. Los paramilitares les intimidaron, les amenazaron, luego de preguntarles que diligencias iban a realizar al municipio de Río Sucio.

* Martes 29 de agosto, aproximadamente a la 1:00 p.m. un grupo de 15 paramilitares ingresó al caserío de Travesía o Puente América, territorio colectivo de Cacarica, obligando a los afrocolombianos que allí se encontraban a tenderse en el suelo, luego los amenazaron de muerte y lanzaron disparos al aire para generar terror en la comunidad.

La reacción de la propia comunidad para exigir respeto a sus vidas les disuadió y estos se retiraron del lugar nuevamente en la embarcación con motores de alta potencia en la que habían llegado minutos antes.

De acuerdo con informes recibidos esta operación paramilitar se ordenó desde Unguía.

Los mandos de estas estructuras permanecen en operaciones de planeación y seguimiento a sus actuaciones en Río Sucio, Turbo, Acandí. Estos municipios cuentan con presencia militar y policial permanente.

* Miércoles 30 de agosto, a las 3:00 p.m. en el ingreso al caserío de San José La Balsa, Cacarica, se constato sobre el Río Balsa el transporte ilegal de la especie forestal cativo, que se encuentra en vías de extinción, con maquinaria de la empresas Maderas del Darién Pizano S.A., ubicada en las siguientes coordenadas: N 07o 31′ 34.0” y W077o 09′ 13.8”

De acuerdo con pobladores, dentro de las embarcaciones de la empresa suelen movilizarse efectivos de las estructuras paramilitares.

* Martes 4 de septiembre, a eso de las 9:10 a.m. luego de pasar el caserío de Tumaradó paramilitares que se movilizaron en una embarcación con motores de alta potencia retuvieron la embarcación de la Comunidad de Vida, Dignidad del Cacarica, CAVIDA, en las que se movilizaban hacia el territorio colectivo más de 20 personas.

Los paramilitares luego de revisar la embarcación hurtaron más de 120 galones de gasolina de los habitantes de la Zona Humanitaria que estaban destinados para el funcionamiento de la radio y televisión comunitaria, el alumbrado de las Zonas Humanitarias, la escuela y centros de salud.

Los paramilitares con armas y radios de comunicación afirmaron que eran las órdenes del “patrón” que se encuentra en Turbo.

Nuestra Censura Ética ante las actuaciones ilegales y legales que bajo el pretexto de enfrentar a la guerrilla de las FARC están afectando y están dirigidas directamente contra los civiles con violaciones a sus derechos humanos y de manera recurrente con infracciones al derecho humanitario. Resulta absolutamente escandaloso que desde 1996 continúen operando retenes de control paramilitar en Tumaradó y a las afueras del municipio de Río Sucio, y que en los últimos dos años, estos puestos de control se hayan ampliado a tres puntos más sobre el Atrato, sin que el batallón fluvial ni los efectivos policiales o militares de tierra les hayan enfrentado.

Resulta todo más escandaloso cuando estas estructuras operan en los cascos urbanos de Ungía, Acandí, Río Sucio, Santa María y Turbo en medio de la presencia policial y militar sin que los integrantes de estas estructuras armadas sean combatidas, desestructuradas, más bien se les observa departiendo o moviéndose con absoluta confianza delante de todas las autoridades. Ambas situaciones constatan el fracaso del proceso de desmovilización de las estructuras paramilitares, y por lo menos, la evidente omisión y tolerancia, cuando no, la interacción de lógicas de operación entre estructuras regulares y encubiertas bajo el mismo propósito.

Nuestra Censura Ética ante la continuidad de operaciones militares de la brigada 17 que están generando un estado permanente de zozobra, daños a bienes de supervivencia, limitaciones en la libertad de movimiento, en la posibilidad de desarrollo de los planes de actividades de siembras de pan coger y daño a la integridad personal de los afrocolombianos de Cacarica.

Nuestra Censura Ética ante la constatación que estas operaciones paramilitares y las afecciones de las operaciones de la brigada 17 continúan sucediendo días después de conocerse la condena a 26 años contra el general (r) RITO ALEJO DEL RÍO por el crimen de MARINO LÓPEZ MENA, en operaciones conjuntas de la brigada 17 con paramilitares ocurridas hace 15 años en desarrollo de la operación “Génesis”.

Nuestra Censura Ética ante la continuidad de operaciones paramilitares en medio del avance de proyectos sobre el territorio colectivo de Cacarica como la construcción del Puente de las Américas, en el que uno de los principales accionistas de la concesión es WILLIAM VÉLEZ SIERRA, y la Interconexión Eléctrica con América Central que atraviesa el Cacarica, sin que existan garantías para consultas en condiciones de libertad o sin que los habitantes hayan sido informados. Como hace 15 años atrás, con maquinaria de la empresa extractora Maderas del Darién Pizano S.A se realizan operaciones ilegales extractivas del recurso forestal cativo sin que ninguna autoridad ambiental actúe.

En conformidad con el artículo 23 de la Constitución Nacional solicitamos respetuosamente se nos informe:

1. ¿Qué protocolos se han definido para las actuaciones de los efectivos de la brigada 17 que se encuentran sobre el territorio colectivo de Cacarica? ¿Por qué se persiste en el uso arbitrario de los predios donde las familias de los consejos comunitarios siembran sus productos de alimentación?

2. ¿Qué reportes ha recibido la comandancia de la brigada 17 sobre las actuaciones en predios de familias del consejo comunitario con daños sobre civiles y sobre bienes de supervivencia?

3. Ante los reportes arriba consignados en esta Constancia, ¿qué actuaciones van a realizar con que propósitos?

4. Respecto a las operaciones paramilitares o llamadas BACRIM que han sido puestas en su conocimiento en la anterior Constancia, ¿qué medidas se adoptaron? ¿Cuáles fueron sus resultados?

5. Respecto a las actuaciones paramilitares o llamadas BACRIM que son puestas en conocimiento en esta Constancia y que confirman la continuidad de retenes en Tumaradó, La Honda y la salida del municipio de Río Sucio hacia el norte por el Atrato, ¿Qué medidas se van adoptar?

6. ¿En tanto, varios de los afectados son beneficiarios de Medidas Cautelares cuáles son los planes de protección para evitar daños irreparable a la vida e integridad?

7. Respecto a las operaciones empresariales de Maderas del Darién Pizano S.A. ¿Qué medidas se van a adoptar ?

Esperando su pronta y eficaz respuesta para estas comunidades que durante 15 años han sufrido la violencia para asegurar proyectos empresariales, de toda consideración,

Comisión Intereclesial de Justicia y Paz