Veeduría del cese unilateral de las FARC-EP por DIPAZ

“La sangre vertida por miles de inocentes en Colombia sostenga los esfuerzos para lograr una definitiva reconciliación en las conversaciones entre el gobierno de Colombia y las FARC… “No tenemos derecho a permitirnos otro fracaso más en este camino de paz y reconciliación” Papa Francisco.


Bogotá, D.C., 21 de octubre de 2015

Juan Manuel Santos
Presidente de Colombia

Humberto de la Calle Lombana
Jefe Negociador del Gobierno

Sergio Jaramillo
Alto Comisionado de Paz

Rodrigo Londoño Echeverri
Comandante de las FARC-EP

Luciano Marín Arango
Jefe Negociador del las FARC-EP

Nicolas Rodriguez Bautista
Comandante del ELN

“Dichosos los que trabajan por la Paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios” (Mt. 5,9).

“Es la naturaleza de la iglesia ayudar en temas como la reconciliación, el perdón y el arrepentimiento. Las iglesias en Colombia también tienen el apoyo de la comunidad internacional y yo estoy acá representando ese respaldo desde el Consejo Mundial de Iglesias” Rev Olav Fykse Tveit

Reciban un cordial saludo

El Diálogo Intereclesial por la paz en Colombia DiPaz, como uno de los procesos organizados en Colombia que hacen veeduría desde el 20 de julio de 2015 la veeduría al cese unilateral al fuego declarado por la guerrilla de las FARC-EP y medidas de escalamiento establecido por el gobierno nacional, en este oportunidad hace pública las constataciones del período comprendido entre el 20 de septiembre y el 20 de octubre.

Expresamos nuestro beneplácito por los dos acuerdos trascendentales para la paz con justicia, ocurridos en el período que nos ocupa, en relación la Jurisdicción Especial para la Paz y el acuerdo humanitario de personas desaparecidos. Son anuncios que se deben materializar con la voluntad de cumplimiento de las partes firmantes y con la intervención de la sociedad, en particular en el respeto a la dignidad de las víctimas que ha dejado el conflicto armado interno.

Seguimos también con la expectativa esperanzada por el anuncio del inicio de los diálogos formales entre el gobierno y la guerrilla del ELN, que completarán el panorama de avances, pues sin el concurso de esta organización insurgente, la paz estable y duradera que anhelamos será imposible de alcanzar.

Tal como lo expresamos en el resumen del informe conjunto que adjuntamos, saludamos la disminución de las operaciones militares por parte de la Fuerza Pública y el completo cumplimiento al cese unilateral por parte de las FARC-EP. Sin embargo sigue siendo necesario que se decrete el cese bilateral al fuego por el que hemos venido clamando, de modo que se supere cualquier amenaza de regresar a los niveles de escalamiento de la confrontación que presenciamos unos meses atrás con su grave afectación a la población civil y al medio ambiente.

En el mes observado, se han registrado dos (2) casos de ametrallamiento y dos (2) casos de bombardeo por parte de la Fuerza Pública, mientras que por parte de las FARC-EP no se conoció ninguna acción militar. Ello ha generado pronunciamientos de las FARC-EP en que se advierte el riesgo en que está el cese unilateral declarado tres meses atrás.

Estructuras paramilitares o neo paramilitares continúan con fuerte presencia, en los departamentos de Chocó, Meta, Norte de Santander, Bajo Cauca Antioqueño, Tumaco y con presencia menos visible en buena parte del territorio nacional. En el Bajo Atrato Chocoano las Autodefensas Gaitanistas han producido el desplazamiento de cerca de 150 familias de la cuenca del río Truandó y al menos 3 enfrentamientos con fuerzas mixtas de las guerrillas de las FARC-EP y del ELN con 14 muertos por parte de los paramilitares. En San José de Apartadó asesinaron a un campesino y amenazas con la comisión de nuevos crímenes. En Mapiripán, Meta, en medio del proyecto palmero de la empresa transnacional Poligrow ejercen control ante la mirada de la Fuerza Pública. También se han distribuido panfletos amenazantes contra líderes sociales, entre ellos a dos miembros de iglesias vinculados con Dipaz.

Así mismo los asesinatos y desapariciones forzadas de dirigentes sociales, políticos, de derechos humanos y comunidades urbanas preocupan altamente. En el período han sido asesinadas 5 personas, 3 han sido desaparecidas y 13 judicializadas, pertenecientes a los sectores sociales mencionados

Al cierre del período verificado conocimos de la notificación de apertura de pliego de cargos contra el senador del Polo Democrático, impulsor del Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado y parte de esta Veeduría por el Frente Amplio Común por la Paz, Iván Cepeda Castro. Situación similar han padecido, entre otros, la ex senadora Piedad Córdoba y el actual alcalde de Bogotá Gustavo Petro. Esta decisión tomada por el debate que el senador Cepeda adelantó contra el expresidente y senador Alvaro Uribe, es una clara obstrucción a los esfuerzos de paz desde la búsqueda de la verdad, Justicia y garantías de no repetición, como también evidencia la ausencia de garantías para la participación política en la dirección del segundo acuerdo parcial acordado en la mesa de diálogos de la Habana.

Seguimos con la esperanza de que esta grave situación en materia de derechos civiles y políticos, económicos, sociales, culturales y ambientales se resuelva por la acción decidida del Estado, a la par de los avances en las mesas de diálogo entre el gobierno y las dos insurgencias, pues de persistir la crisis en materia de derechos humanos, los importantes acuerdos alcanzados, se verán con serios impedimentos para su puesta en práctica.

Con esperanza,

Dialogo Intereclesial por la Paz en Colombia -DIPAZ-