Ocupantes de mala fe reciben ayuda de damnificados por el invierno
Amenazas de muerte y nueva estrategia paraempresarial.
Más de 200 hectáreas se encuentran ocupadas por invasores patrocinados por paramilitares asentados a menos de dos minutos de la presencia de la brigada 17 en Brisas de Curvaradó. Se conoció que empresarios bananeros en Curvaradó se encuentran estimulando esta ocupación de mala fe.
Igualmente se han desviado las ayudas para los damnificados recepcionadas por la alcaldía de Carmen de Darién a los ocupantes de mala fe.
La orden de desalojo resuelta por la Inspectora municipal de Carmen del Darién, luego de una dilatación, no se ha acatado debido a que la policía de Urabá argumenta no tener capacidad para cumplir la decisión policial.
Mientras esta operación arbitraria contra los integrantes del concejo comunitario menor sucede y se consolida con la destrucción de Zonas de Biodiversidad y la construcción de viviendas, se conoció de un plan empresarial entre los que participa entre otros el cuestionado empresario y beneficiario del paramilitarismo Gabriel Sierra, con el ofrecimiento de recursos y de constitución de sociedades con habitantes de Curvaradó y Jiguamiandó para agronegocios de banano y de ganado.
La estrategia paraempresarial se interpreta como un saboteo al auto de la Corte Constitucional y la voluntad del gobierno nacional de acatamiento. Los empresarios han planteado además, continuar una campaña de desprestigio y difamación, así como, impulsar una presión sobre la Fiscalía para que resuelvan decisiones en contra de derecho de privación de la libertad contra líderes y lideresas de Curvaradó y Jiguamiandó e integrantes de la Comisión de Justicia y Paz.
En medio de estas operaciones empresariales, los nexos y unidad de acción entre paramilitares y fuerza pública se evidencian. Su control sobre comunidades, carreteras, la autorización del paso de pobladores y las amenazas se perpetúan como ocurrió con Adriana Tuberquia y Leydis Tuirán.
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