Destrucción de bienes de supervivencia a afrocolombianos de Calima
Nuestra Constancia y Censura Ética escrita ante los abusos de autoridad cometidos por las fuerzas militares adscritas a la brigada 2 , batallón 80, contra los afrocolombianos que habitan en el territorio del bajo Calima con las quema de sus ranchos ubicados en lugares de prácticas tradicionales productivas
JUAN MANUEL SANTOS
Presidente de la República de Colombia
GERMÁN VARGAS LLERAS
Ministerio del Interior
MARÍA ANGELA HOLGUÍN
Ministra de Relaciones Exteriores
JUAN CAMILO RESTREPO
Ministro de Agricultura
VIVIANE MORALES
Fiscal General de la Nación
ALEJANDRO ORDOÑEZ
Procurador General de la Nación
VOLMAR PÉREZ
Defensor Nacional del Pueblo
BEATRIZ ELENA URIBE BOTERO
Ministra de Medio Ambiente
Dame tu viñedo para que yo pueda tener en el una huerta, ya que está al lado de mi palacio. A cambio de él te daré un viñedo mejor; o, si lo prefieres, te pagaré su valor en dinero, dijo Acab. Pero Nabot respondió: No permita la Vida que yo te dé lo que he heredado de mis padres. I Reyes, 21, 1 – 3.
Nuestra Constancia y Censura Ética escrita ante los abusos de autoridad cometidos por las fuerzas militares adscritas a la brigada 2 , batallón 80, contra los afrocolombianos que habitan en el territorio del bajo Calima con las quema de sus ranchos ubicados en lugares de prácticas tradicionales productivas, acciones contra derecho, que benefician la implementación de proyectos de infraestructura que no han sido consultados adecuadamente en conformidad con el derecho internacional, en particular, el artículo 169 de la OIT y han afectado gravemente 119 familias en su derecho a la supervivencia, la alimentación y la propiedad
Nuestra Constancia ante la cuarta ocasión en que se repiten los daños a bienes de los afrocolombianos de la comunidad El Crucero ubicados a lado y lado de la vía usada ancestralmente desde el kilómetro 7,5 hasta los esteros ubicados frente al perímetro urbano de Buenaventura. Desde el 2005 la vía ha sido usada por los operarios del proyecto “Puerto Industrial Agua Dulce S.A.”, desconociendo que esta área es parte de la habitación tradicional del territorio colectivo de la comunidad negra del bajo Calima.
De acuerdo con los testimonios de las víctimas en el 2005, la empresa destruyó 13 ranchos con la realización del estudio topográfico del proyecto. Cinco años después, en 2010, en dos ocasiones, sus bienes de habitación fueron destruidos. El 12 de febrero trabajadores del proyecto destruyeron 23 ranchos y el 5 de noviembre lo propio hicieron los militares quemando 11 ranchos.
En agosto de 2010, de acuerdo con familias de la comunidad negra de El Crucero, la Reserva ecológica que constituyeron desde el año 97 en convenio con Corporación Ambiental Regional del Valle del Cauca apoyado por la embajada de España en un área de 20 hectáreas fue afectada por el proyecto en una franja de 8 kilómetros por 1,5 hectáreas de ancha ocasionando un daño ambiental, que fue denunciado ante la autoridad ambiental.
Nuestra Constancia Histórica ante los siguientes graves hechos contra los derechos de los afrocolombianos
*Miércoles 19 de enero hacia las 2:00 p.m. en el caserío conocido como El Crucero, Km 9 del territorio colectivo de Bajo Calima, unidades militares adscritas a la Brigada 2a, Batallón 80, que se ubican de manera permanente en el kilómetro 7.5 prendieron fuego a 24 ranchos ubicados a lado y lado de la carretera que conduce al proyecto de infraestructura portuaria intermodal conocido como “Puerto Industrial Agua Dulce S.A.”,
De acuerdo con los testigos, más de una decena de militares se desplazaron por la carretera que usa exclusivamente la empresa “Agua Dulce” y a menos de 2 kilómetros procedieron a quemar los ranchos que los afrocolombianos usan como lugares de habitación y desde los cuales realizan siembras de pan coger, talas de algunos recursos forestales, reforestación, plantas medicinales.
Según los testigos, entre los militares se identificó al cabo CERDA, quien manifestó que cumplían órdenes de sus superiores, y que debían dirigirse al Batallón 80. Agregaron los militares que el coronel asumió acuerdos con el gerente de agua dulce para proteger la vía.
*Lunes 31 de enero aproximadamente a las 12:05 p.m. al punto conocido como Kilómetro 7,5 del territorio colectivo del bajo Calima, llegaron unidades militares, entre ellas, la teniente EDNA CALDERÓN y el Capitán RÓMULO AREIZA, preguntaron a un miembro de la comunidad por GERALDÍN BALANTA, joven lideresa del Bajo Calima.
GERALDINE, de 17 años, de la organización Jóvenes Unidos por el bienestar de Calima – JUBCA – e integrantes del pueblo Nonam, participaron en una serie de reuniones con el gobierno nacional e integrantes de la comunidad internacional compartiendo la situación de titulación comunal, el conflicto armado interno y sus iniciativas de afirmación no violenta de sus derechos
Los militares afirmaron que buscaban a GERALDINE debido a que la lideresa profirió mentiras sobre la fuerza pública acusándola de quemar ranchos y que les había demandado. Los regulares AREIZA y CALDERÓN dejaron sus datos de números telefónicos y se retiraron del lugar.
*Jueves 3 de febrero a eso de las 11:30 a.m. nuestra Comisión de Justicia y Paz fue informada de la situación de riesgo en que se encontraba la comunidad de Colonia debido a ráfagas y detonaciones en el cementerio de la comunidad.
Según los medios de información local, ese día a unos 20 minutos del caserío de El Crucero una misión de verificación de los efectos causado por la ola invernal custodiada por militares fue atacada por la guerrilla de las FARC EP.
*Lunes 7 de febrero hacia las 6:30 p.m. afrocolombianos del bajo Calima fueron informados que militares de la brigada 2, el viernes anterior, 4 de febrero, tumbaron y quemaron 25 ranchos de los habitantes.
De acuerdo con un relato, un efectivo regular sostuvo que ellos recibieron la orden de tumbar los ranchos porque de estas áreas no puede hacer uso nadie. Aseguró que la orden venía de las directivas del proyecto que solicitaron a las fuerzas militares impedir el acceso de los afrocolombianos por la carretera y evitar la construcción de ranchos.
*Martes 15 de febrero a las 2:00 p.m. aproximadamente en reunión con el Comité Distrital para atención a la población desplazada de Buenaventura, el teniente coronel ALBEIRO GARCÍA del batallón 80, afirmó que no tenía información oficial de la situación de la comunidad negra de “El Crucero”, precisó que la infantería no estaba para ese tipo de acciones. Aseveró que el 31 de enero al visitar la zona del Km. 7,5 en cercanía de los ranchos encontraron explosivos escondidos, y hace 25 días cerca del sitio conocido como Gamboa y el Km.7. En el lugar hallaron 30 kilos de dinamita, explosivos de metralla para atentar contra la población y contra la brigada. Agregó que 15 días después encontraron 5 kilos más de dinamita
*Viernes 25 de febrero hacia las 10:00 a.m. nuestra Comisión de Justicia y Paz fue informada que existía una orden de militarizar la carretera que conduce al lugar de construcción de la ampliación del puerto sobre el Bajo Calima entre el kilómetro 7.5 hasta el lugar de operación empresarial del proyecto de “Agua Dulce”. En la misma orden se pretende impedir el acceso a los afrocolombianos para sus labores tradicionales
De acuerdo con testimonios allegados a nuestra Comisión de Justicia y Paz desde enero del año pasado son recurrentes las operaciones intimidatorias de las fuerzas militares con tiros al aire. Estos disparos se interpretan como simulación de ataques o enfrentamientos con la guerrilla. Las actuaciones ocurren cuando los pobladores van a los lugares de siembra, de recolección, de caza y de pesca.
Nuestra Constancia Histórica ante este abuso militar y empresarial contra los afrocolombianos del caserío El Crucero, hoy más conocido, como comunidad del “Kilómetro 9” del bajo Calima. Ellos y ellas han habitado estos territorios desde hace más de 70 años y han solicitado la titulación de 11 mil hectáreas que les fueron excluidas de reconocimiento legal de ocupación. Esta porción de territorio en la que ellos tradicionalmente realizan sus labores de pan coger, la cacería y la pesca les pretenden ser desconocidas legalmente y con las actuaciones contra derecho.
Nuestra Constancia Histórica ante la grave crisis alimentaria que vienen experimentando los afrocolombianos por la imposibilidad de salir a sus lugares de trabajo desde el mes de julio cuando inició la ofensiva paramilitar y militar en la zona del San Juan y Bajo Calima, la crisis invernal de diciembre y la actual quema de ranchos e impedimento a la libre movilización e impedimento de trabajar en predios habitados tradicionalmente.
Nuestra Censura Ética ante la inacción judicial pues los hechos no han sido objeto materia de investigación alguna, debido a que la Fiscalía de Buenaventura, pretende negar a investigar la noticia criminal con argumentos condicionantes como la necesidad de presentar copia de los títulos colectivos.
En conformidad con el artículo 23 de la Constitución Nacional se nos informe en conformidad con sus competencias institucionales:
1. Qué medidas, en qué fechas y quiénes son los mandos responsables para hacer cumplir medidas tendientes a evitar la repetición de abusos de autoridad por parte de las Fuerzas Militares y la infracción al derecho humanitario con los habitantes del bajo Calima, luego de conocida la situación de quema de ranchos?
2. En qué estado se encuentra la titulación colectiva del bajo Calima y en particular de los lugares que han habitado tradicionalmente los afrocolombianas de la comunidad “El Crucero”?
3. Qué consulta previa se realizó, cuándo, cómo y con quiénes, por parte de que entidades y en empresas para el uso, ocupación de los espacios tradicionales de habitación desde el kilómetro 7.5 hasta donde hoy se realizan operaciones de obras de infraestructura?
4. Qué medidas preventivas y de protección se van a adoptar con los líderes y lideresas de las comunidades del bajo Calima, que sin la violencia, que como parte del derecho a la verdad han exigido esclarecer la situación de titulación y las responsabilidades institucionales con los habitantes del bajo Calima?
Con profunda preocupación y en espera de su respuesta,
Comisión Intereclesial de Justicia y Paz